Los Detroit Pistons eran los más interesados en contratar a Jason Collins. Existió un diálogo, aunque finalmente nunca llegó la oferta formal. A los 34 años, el ex pivot de los Wizards siente que su declarada homosexualidad le está jugando en contra, aunque diferentes referentes de la NBA le expresaron apoyo.
El 29 de abril, Collins se convirtió en el primer jugador del deporte profesional estadounidense en reconocer públicamente su condición de gay, cuando aún se mantenía como jugador activo y en pleno desarrollo de la temporada.
«Sinceramente, la veo como cualquier otra agencia libre de los últimos años, donde sé que tengo que ser paciente. Hay que mantener la esperanza de que un trabajo y una oportunidad me esperan», le dijo Collins a The New York Times en julio.
El pivot de 2,13 m completó, la campaña pasada, su duodécima temporada en la NBA, donde militó en seis equipos. Pero tras revelar su orientación sexual y quedarse sin contrato en los Wizards, ninguno de los 30 equipos de la NBA le hizo una oferta.
Luego de la confesión en abril, Kobe Bryant fue uno de los jugadores que salieron a respaldarlo: «Orgulloso de ti. No asfixies quien eres por la ignoracia de otros».