Las autoridades de Nueva York y Nueva Jersey evacuan este miércoles a los residentes de las zonas costeras ante la proximidad de una tormenta que pudiera agravar las afectaciones provocadas la semana anterior por el huracán Sandy.
Según los pronósticos meteorológicos, olas de dos metros de altura, vientos de hasta hasta 96 kilómetros por hora y frecuentes aguaceros impactarán el litoral de esos territorios estadounidenses, con consecuentes inundaciones que podrían el suelo.
El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, ordenó el cierre de parques y playas, así como la prohibición de labores de construcción a la intemperie.
Las compañías aéreas United y American Airlines anularon 770 vuelos hasta el mediodía del jueves.
Nueva York y Nueva Jersey son los estados más afectados por el paso de Sandy, con saldo nacional de al menos 111 muertos, pérdidas materiales estimadas en más de 50 mil millones de dólares y 930 mil consumidores todavía sin electricidad.
La Agencia Federal para Manejo de Emergencias cifró en 95 mil las personas sin hogar en ambos territorios que necesitan asistencia habitacional urgente.