La explosión de un coche bomba este sábado frente a una base de la policía egipcia ha causado al menos nueve heridos.
Este atentado, según el general Abdel Fatah Ozmán, se ha producido en la calle cercana a la base, ubicada en las inmediaciones de la ciudad de Suez.
En otros incidentes ocurridos en la misma jornada, la academia de policía de El Cairo y el centro policial del barrio de Hadayeq el-Qobba han sido blanco de hombres desconocidos.
Dichos ataques se producen solo un día después de que cuatro atentados contra sedes de la Policía dejaran al menos seis muertos y decenas de heridos también en El Cairo, y el Museo de Arte Islámico quedara completamente destruido al explotar un artefacto en sus inmediaciones.
“El museo necesita ser reconstruido de nuevo, pero primero será evacuado, para sacar del edificio todas las piezas arqueológicas”, dijo el ministro de Antigüedades, Mohamed Ibrahim.
El atentado destrozó la fachada del edificio y las vitrinas que exhibían más de dos mil joyas islámicas procedentes de todo mundo, incluido España.
La explosión también causó la destrucción de varias plantas del edificio del Tribunal del Sur de El Cairo, situado frente al museo.
Los atentados contra las fuerzas militares se han multiplicado desde que las fuerzas armadas destituyeron en julio a Mohamad Mursi, único presidente elegido democráticamente en Egipto.