Seis nuevos casos se reportaron hoy en China infectados con el virus H7N9, una cepa letal de la fiebre aviaria que hasta el momento ha cobrado 11 vidas
Reportes desde diversas regiones del este de esta nación asiática elevaron a 57 la cantidad de personas que han sido contaminadas con esta nueva variedad de la también conocida como la fiebre del pollo.
Dos casos respectivamente en la provincia central de Henan, cuatro en la de Zhejiang y dos en la de Jiangsu ingresaron el domingo a la lista de afectados por esta enfermedad, de acuerdo con informaciones del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de China.
Entretanto, en el distrito capitalino de Shunyi, donde una niña de siete años fue confirmada infectada con el virus H7N9, las autoridades sacrificaron medio millar de aves.
Los padres de la pequeña, que es el único caso de ese tipo de influenza aviaria en Beijing, son mercaderes de aves vivas y se encuentran bajo observación médica aunque no muestran ningún signo de la dolencia.
De acuerdo con las investigaciones, ellos vendieron en Shunyi unas 75 aves adquiridas en la vecina municipalidad de Tianjin.
Autoridades de salud esterilizaron la vivienda de la niña, la escuela a la que asiste, el mercado de aves y los sistemas de basuras para tratar de controlar una posible expansión de este virus.