El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presionó este sábado al Congreso del país para que apruebe el proyecto de Ley de creación de empleos, que será sometido a discusión el próximo lunes.
El mandatario afirmó que algunos legisladores prefieren esperar al año que viene para disputar las elecciones, en vez de “trabajar juntos ahora”.
“Tenemos que conseguir que el Congreso apruebe este proyecto de ley de trabajos”, expresó Obama.
El presidente estadounidense explicó que la iniciativa incluye “el tipo de ideas que han sido apoyadas antes, tanto por demócratas como por republicanos”, reseñó la agencia Ansa.
Obama reclamó al Parlamento que apruebe la ley para generar empleos, ya que este tema “es la cuestión número uno” para los estadounidenses.
Hasta el momento, el partido Republicano no parece dispuesto a ceder frente a los planes para financiar el proyecto, valorado en cerca de 447 mil millones de dólares, dinero que se obtendrá con aumentos de impuestos a los sectores más ricos del país.
“Basta de juegos o trabas, basta de divisiones o demoras, es tiempo de que la gente que ustedes enviaron al Capitolio ponga al país por delante de su partido, que dejen de preocuparse tanto por el trabajo de ellos y comiencen a preocuparse más por el de ustedes”, subrayó el titular de la Casa Blanca.
La consultora Macroeconomic Advisors indicó que, en teoría, la ley que se debatirá proyecta generar un alza en el mercado laboral de 1,3% creando un millón de puestos laborales.
En tanto, la consultora Moody»s aseguró que si la normativa es aprobada, el repunte laboral sería de 2%, generando 1,9 millones de trabajos.
Cuando Obama asumió el gobierno en 2009, la tasa de desempleo se ubicaba en 7.8%, mientras que en la actualidad trepa a 9.1%, con 13.9 millones de personas sin trabajo.
El proyecto de la Casa Blanca fue presentado el jueves pasado ante el Congreso, y prevé la reducción de impuestos para algunas empresas, el impulso del sector de la construcción civil y la extensión de subsidios a ciudadanos desocupados.
Con la iniciativa, Obama intentará reactivar parte de la economía estadounidense, que se encuentra estacada desde hace años, pese a que la Casa Blanca había anunciado el fin de la recesión.