La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó hoy a las mujeres con implantes mamarios del tipo Poly Implant Prothése (PIP) consultar al médico en caso de dolor, inflamación o sospecha de rotura.
Entre los problemas que pueden generar esas prótesis, fabricadas en Francia, está la fuga del relleno de silicona por los defectos de la envoltura, señaló la OMS en un comunicado.
La agencia de la ONU expresó que es necesaria más información sobre los riesgos de esos implantes, que fueron retirados del mercado europeo en 2010 tras constatarse el uso de un gel de baja calidad para su fabricación.
El caso de las PIP debe servir para tener en cuenta la importancia de fortalecer los sistemas de detección de dispositivos médicos ante los «eventos adversos», señaló la OMS.
Las autoridades sanitarias francesas recomendaron en diciembre pasado a las féminas que llevan esos artefactos someterse a una intervención quirúrgica para retirárselos, como medida preventiva.
En otros países las recomendaciones varían desde la extracción, hasta el seguimiento médico de las portadoras.
Los estudios realizados demostraron que la silicona utilizada para su fabricación no está autorizada por las autoridades médicas y causa irritación, inflamación y dolor en caso de rotura de la bolsa, señaló la OMS.
La Poly Implant Prothése llegó a producir hasta 100 mil implantes al año, 84 por ciento de los cuales se vendieron en el extranjero.
Se estima que en el mundo entre 400 mil y 500 mil féminas portan estas prótesis riesgosas para la salud.