La Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidió al Gobierno paraguayo esclarecer la denominada masacre de Curuguaty, ocurrida en junio pasado, que dejó un saldo de 17 muertos: 11 campesino y 6 policías.
La solicitud fue hecha por el español Lorenzo Jiménez, coordinador residente de la ONU en Paraguay, quien además pidió que se realice la investigación pertinente por el asesinato del líder campesino Vidal Vega, reseñó Prensa Latina.
Vega fue asesinado hace poco más de una semana en su propia casa, ubicada en Marina Cué, departamento de Canindeyú, frente a su mujer e hijos.
El campesino era uno de los testigos clave que colaboraba en la investigación independiente sobre el sangriento desalojo de campesinos sin tierra en Curuguaty.
Jiménez dijo que si el país “quiere seguir la senda a favor de los derechos humanos debe esclarecer la matanza (de Curuguaty) y el asesinato de Vega”.
La masacre de Curuguaty fue utilizada por el Congreso para emprender un juicio político contra el presidente Fernando Lugo, mediante el cual lo destituyeron; acción que fue catalogada por organismos internacionales como un golpe de Estado parlamentario.
Una petición igual a la de Jiménez fue hecha por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al aislado Gobierno paraguayo de Federico Franco, nombrado presidente tras el golpe contra Lugo; cuyo Gobierno fue suspendido de su participación en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Mercado Común del Sur (Mercosur) hasta que sea restituido el orden democrático en el país.
El pasado sábado, la Fiscalía General reiteró que la investigación oficial sobre Curuguaty estaba prácticamente cerrada y anunció la publicación del fallo sobre el tema en un plazo de ocho días.