El líder del partido opositor israelí Kadima, Shaul Mofaz, calificó este domingo de manipulador al gobierno de su país por presentar a Irán como una “amenaza existencial”, durante la visita del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Mitt Romney.
Mofaz, hasta hace unos días miembro de la coalición gobernante israelí, señaló que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y el titular de Defensa, Ehud Barak, actuaron de forma manipuladora con la opinión pública para justificar un ataque a Irán.
El político calificó de “retórica sensacionalista” la postura asumida por Netanyahu y Barak. En ese sentido, alertó que un “ataque preventivo israelí contra instalaciones nucleares iraníes tendría consecuencias catastróficas para Israel”.
Shaul Mofaz, a diferencia de Netanyahu y de Mitt Romney, quienes avalaron una eventual agresión contra Irán, opinó que “no es el momento apropiado para un ataque militar”. Sin embargo, afirmó que Israel debe permanecer alerta a todos los acontecimientos referidos a la nación persa.
Las declaraciones de Mofaz a medios locales estuvieron antecedidas de su encuentro con el aspirante presidencial estadounidense.
La visita de Romney a Israel está centrada en el plan nuclear iraní, por lo que aseguró que Tel Aviv y Washington “servimos la misma causa y tenemos los mismos enemigos”.
El Gobierno israelí ha amenazado con atacar Irán con o sin permiso de Estados Unidos porque supuestamente la República Islámica representa una «amenaza» nuclear. Sin embargo, Teherán ha sostenido que su programa sólo tiene propósitos pacíficos y civiles de generación de energía y medicinal.
Pese a las críticas contra Irán, tanto Israel como Estados Unidos han estado involucrados con el uso y desarrollo de armas nucleares.
Israel posee un número no declarado de ojivas nucleares y, a diferencia de Teherán, no ha firmado el Tratado de No Proliferación Nuclear.
Por su parte, Estados Unidos ha desarrollado armas nucleares y ha hecho uso de estás contra las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945, a finales de la Segunda Guerra Mundial, así como se ha negado a firmar algún protocolo de desarme.