Este viernes|Países caribeños rechazan impuesto británico

El anuncio de la aerolínea británica Virgin Atlantic de asumir el pago del aumento de un impuesto de Londres a pasajeros aéreos repercute este viernes de manera positiva en países del Caribe afectados por ese gravamen.

Según los propósitos del Ministerio de Hacienda de Reino Unido, la tarifa crecerá ocho por ciento a partir del próximo mes, y traerá como consecuencias el incremento del gasto de los viajes y menos beneficios a las personas en tiempos de crisis económica.

Los gobiernos caribeños criticaron esta decisión pues están en desventaja competitiva con otros destinos de turistas, principalmente en Estados Unidos, ubicados en bandas inferiores.

Medios regionales de prensa reproducen la posición de Virgin Atlantic de no causar más daños a los viajeros, y llaman la atención en la lucha contra una medida que consideran injusta y desfavorable al desarrollo.

Estamos orgullosos de la defensa de los intereses de los pasajeros, así que hemos tomado la decisión costosa para proteger a los afectados de un recargo de impuestos, expresó en una carta el delegado consejero de dicha compañía, Steve Ridgway.

A su juicio, el Air Passenger Duty (APD) es también un gravamen sobre el turismo y el comercio.

El Caribe pertenece a la banda C de las cuatro que tiene el impuesto, y ese nivel se refiere a la distancia entre destinos de cuatro mil una a seis mil millas de Londres.

Con una tarifa actual de 150 libras esterlinas (238 dólares) por cada pasaje en la clase más alta, quienes estén interesados en viajar a esta región a partir del mes venidero deberán abonar 12 libras (19 dólares) más.

Aquellos que hacen ahora el trayecto en la parte correspondiente a la clase más económica desembolsan 75 libras esterlinas (119 dólares) y eso alcanzará las 83 libras esterlinas (130 dólares) por boleto cuando aumente más.

De acuerdo con el secretario general de la Asociación Caribeña de Hoteles y Turismo, Alec Sanguinetti, en 2007 viajaron a la región desde Reino Unido un millón 373 mil 600 turistas, y en 2010 el número descendió a un millón 103 mil 400.

En su génesis, el APD fue propuesto por razones ambientales, como compensación de las aerolíneas ante la emisión de gases de efecto invernadero que causan el cambio climático.

La medida responde a los intereses del Gobierno británico de reducir el déficit fiscal y restablecer las finanzas públicas, confirmó una fuente del Tesoro.

Texto/Prensa Latina