Panamá, que acaba de salir de una grave sequía que puso en crisis la generación eléctrica nacional basada en hidroeléctricas, comenzará en este mes la construcción de parques eólicos como fuentes alternativas de energía.
La empresa española Unión Eólica Panameña (UEP) anunció hoy que se prepara para la etapa final del proyecto eólico después de preparar las tierras en los llanos de la provincia de Coclé durante casi un año.
Voceros de la empresa confirmaron la llegada de los primeros barcos provenientes de China con las piezas de los aerogeneradores.
El parque eólico, que supone una inversión de 450 millones de dólares, contará con 88 molinos de viento que generarán 220 megavatios anuales, casi un 10 por ciento de la energía que consume el país.
La compañía empezará a transportar las piezas en los próximos días en este mismo mes y espera que a finales de junio ya puedan levantar la primera torre, cuya altura equivale a un edificio de 30 pisos y pesa más de 300 toneladas.