Los presidentes Juan Carlos Varela, de Panamá, y Juan Manuel Santos, de Colombia, instruyeron hoy a sus ministros de Economía y Hacienda para buscar convergencia frente a un diferendo conceptual entre los dos gobiernos.
El centro del impasse lo provocó una decisión de Colombia de incluir a Panamá en una lista de paraísos fiscales que fue protestada por el gobierno istmeño, con resultados satisfactorios para el buen desempeño de las relaciones bilaterales.
Una nota de prensa del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) asegura que su titular, Dulcidio de La Guardia, y el ministro de Hacienda de Colombia, Mauricio Cárdenas, se reunieron este miércoles en Washington durante la Asamblea Anual de Gobernadores del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
Allí se comprometieron a buscar una solución al problema antes de que finalice este año, indica la comunicación.
Panamá tiene objetivos e intereses que proteger, así como Colombia también, por lo tanto de lo que se trata ahora es de buscar puntos de convergencia y encuentro que nos permitan resolver este impasse, declaró De La Guardia, según la nota.
Colombia, añade, solicitó a Panamá suscribir un acuerdo de intercambio de información fiscal pero este se negó toda vez que no es política del país suscribir ese tipo de acuerdos al considerar que no traen beneficios para el país.
De La Guardia y Cárdenas dieron una rueda de prensa en Washington en la que el ministro panameño aclaró que los principales afectados por la decisión colombiana eran los capitales colombianos y empresarios de ese país que han hecho importantes inversiones en territorio istmeño.
La nota del MEF ilustra esa delicada situación al señalar que casas colombianas controlan 26 por ciento del centro bancario panameño, la empresa Celsia acaba de adquirir los activos de generación de Suez Panamá, y los grupos Argos y Luker ejecutan inversiones importantes en los sectores industriales.