La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, viajará este lunes a Sudáfrica para participar a una ceremonia oficial de homenaje a Nelson Mandela, fallecido en jueves último a los 95 años de edad.
Acompañada de los exgobernantes Luiz Inácio Lula da Silva, Fernando Henrique Cardoso, Fernando Collor y José Sarney, Rousseff fue invitada junto con líderes y personalidades de varios países a asistir el martes en Soweto, en Johannesburgo a una misa en homenaje al líder antiapartheid.
Esta ceremonia oficial se incluye entre las actividades que realiza el gobierno surafricano para rendir tributo a Mandela, el primer jefe de Estado negro de esa nación, cuyo sepelio está programado para el 15 de diciembre próximo.
La visita de la mandataria de Brasil, prevista inicialmente para el día 15, varió porque el gobierno sudafricano preparó una misa fúnebre con la presencia de varios gobernantes, destacó un vocero presidencial.
Las autoridades brasileñas decretaron duelo nacional de siete días, tras la muerte de Mandela, quien fue considerado aquí como una de las grandes personalidades del siglo XX que condujo con pasión e inteligencia uno de los más importantes procesos emancipadores de la historia contemporánea: el fin del apartheid en África del Sur.