El presidente Evo Morales destacó este martes el récord alcanzado por los ingresos generados por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) durante el año, la que llegó a los cuatro mil millones de dólares.
«Estimamos que este año podíamos llegar a unos tres mil 500 millones de dólares, pero me informan que llegamos a los cuatro mil millones», resaltó Morales durante la promulgación de la ley de incorporación de los empleados municipales a la Ley General del Trabajo, en esta capital.
Para el jefe de Estado este resultado es fruto de la lucha del pueblo, de la Central Obrera Boliviana y de todos los sectores sociales y de ninguna manera es un regalo realizado por él.
Según destacó recientemente el presidente ejecutivo de YPFB, Carlos Villegas, esta renta petrolera histórica obedece entre otras cosas al aumento de producción certificada y el incremento de precios en la comercialización de gas natural a los mercados de Brasil y Argentina.
El pasado sábado, el vicepresidente Álvaro García se refirió al tema durante la inauguración de la perforación exploratoria del pozo Ingre X2, en el sureño departamento de Chuquisaca.
García recordó que antes de la nacionalización de los hidrocarburos, en 2006, el Estado boliviano recibía por esta actividad 670 millones de dólares, y que en 2011 los ingresos fueron de dos mil 989 millones de dólares.
Se imaginan pasar de 600 millones a cuatro mil, ¿dónde estaba ese dinero antes? se preguntó el Vicepresidente.
Al mismo tiempo señaló que esos recursos económicos siempre existieron, pero fueron a parar a manos del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada y de empresas extranjeras. Sin embargo, en tiempos del presidente Evo Morales con esos ingresos se financian carreteras, salud, educación, se pagan bonos a niños, madres y personas de la tercera edad, construimos el desarrollo del país, subrayó.
Añadió que con la nacionalización de los hidrocarburos no sólo se recuperaron los recursos naturales, sino también se inició el control de los excedentes, que ahora permanecen en el país.