El presidente ecuatoriano Rafael Correa lamentó este viernes que en América Latina se satanice los liderazgos, luego de que en la década de los noventa la región padeció de la falta de líderes.
“El liderazgo no es malo en sí mismo, es tener influencia sobre los demás. Utilizar esa influencia para sacar adelante a todo un pueblo es bueno. El problema son los malos líderes, que utilizan ese liderazgo para servirse de los demás”, dijo el Dignatario durante un programa radial.
El Jefe de Estado ecuatoriano sostuvo que la falta de liderazgo fue una de las mayores crisis de América Latina en los noventa.
“¿Se acuerdan (de) los líderes que había en América Latina: los Fujimori (Alberto –Perú-), los Menem (Carlos -Argentina-, los Color de Mello (Fernando -Brasil-), Endara (Guillermo –Panamá-). Una barbaridad”, refirió Correa.
Agregó que “felizmente” en el siglo XXI Latinoamérica vio llegar líderes “de la talla” de Néstor Kirchner, Lula da Silva, Evo Morales, Hugo Chávez, “les guste o no les guste”.
Respecto a la relación de la prensa con los gobiernos progresistas, el mandatario ecuatoriano aseveró que “es claro que a los gobiernos que somos un peligro para el status quo y las relaciones de poder, vigentes históricamente en nuestra América, nos dan con todo”.
En este sentido, mencionó que uno de los factores determinantes para la caída del presidente chileno Salvador Allende, en 1973, fue diario El Mercurio. “Esto no es un secreto para nadie”.
“Siempre he sabido esta falta de honestidad, de ética, sobretodo en América Latina porque lo que se ve aquí no se ve en Europa, no se ve en Estados Unidos, ni de lejos”, afirmó.