El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció su disposición de firmar un proyecto de ley que permita a los inmigrantes indocumentados tener acceso al sistema de educación pública.
El mandatario reafirmó su apoyo al proyecto de ley para el Desarrollo, Asistencia y Educación para Menores Extranjeros, conocida por sus siglas en inglés como Dream Act, que no ha sido aprobado por la negativa de los legisladores republicanos.
Los pronunciamientos de Obama estuvieron dirigidos a los asistentes a la recepción por el 5 de mayo, celebrada en el Jardín de las Rosas, en la Casa Blanca.
El 5 de mayo es celebrado en Estados Unidos como el Día del Orgullo Mexicano, conmemorando la Batalla de Puebla, primera derrota propinada por el ejército azteca a una potencia extranjera.
Obama señaló que seguirá presionando para que el Dream Act sea aprobado, junto con otras reformas, a lo que calificó como el sistema de inmigración quebrado del país.
Aunque el Presidente cuenta con el apoyo de la mayoría de los votantes hispanos, muchos se sienten frustrados por su falta de liderazgo en una postergada reforma migratoria.
El proyecto de ley busca permitir que los gobiernos estatales ofrezcan cuotas preferentes de enseñanza a los estudiantes sin residencia legal.
La aprobación de esa legislación permitiría a los inmigrantes indocumentados un camino a la ciudadanía a través de los estudios universitarios o si se incorporan a las fuerzas armadas.
Poner nuevamente sobre el tapete legal la discusión de esta ley, es una estrategia de Obama, en su afán por conquistar el voto latino y conseguir la reelección en noviembre.