Este jueves, el presidente de la República, Nicolás Maduro, destacó que la rebelión del 27 de febrero de 1989 fue histórica, un hecho contra dos siglos de saqueo y represión sobre el pueblo.
El jefe de Estado calificó el 27 de febrero como “la primera rebelión antiimperialisa contra el Fondo Monetario Internacional (FMI)».
Y hoy, a 36 años de aquel estallido popular, «acá en Caracas, la cuna de Bolívar, está el pueblo soberano”, defendiendo la Revolución Bolivariana.
En efecto, se trató de “una reacción contra dos siglos de traición, de saqueo y dominación”, indicó, al recordar que en aquel entonces se “masacró” a un pueblo y era un momento en que los “revolucionarios eran minoría”.
Fueron “días dolorosos, sangrientos de conmoción”, pero fue un parto con dolor, con violencia” el del nacimiento del proceso revolucionario.
Este jueves el pueblo venezolano salió a marchar recordando los 36 años de la masacre del 27 de febrero de 1989, cuando a raíz de la aplicación de medidas impuestas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), la población salió a protestar.
36 años después del Caracazo el poder en el país le pertenece al Pueblo, que tiene una inmensa capacidad de movilización, resaltó Maduro.
«Si alguien en el mundo se pregunta, ¿dónde está el poder en Venezuela? El poder está aquí en las calles, en el Pueblo soberano, en el Pueblo rebelde y revolucionario», enfatizó.
Al recordar los sucesos de aquel 27 de febrero, cuando el gobierno neoliberal de Carlos Andrés Pérez mandó a matar a la población, el Dignatario venezolano señaló que «somos los sobrevivientes de la masacre, pero también somos los herederos y las herederas de la rebelión popular de aquellos días heroicos y dolorosos».