El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó este viernes que «cuando toca roncarle duro al imperio, toca», pues aseguró que no le tiene miedo ni al Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.), «ni a la oligarquía, ni a nadie».
Durante el acto en conmemoración a un año del apoteósico cierre de campaña electoral realizado por el Comandante Eterno Hugo Chávez en la avenida Bolívar, transmitido por cadena de radio y televisión, el jefe de Estado ratificó que posee suficientes pruebas de la conspiración que pensaba realizar el gobierno estadounidense en el país.
Por ello, hizo un llamado al pueblo venezolano a enfrentar cualquier reto con serenidad, confianza, fe y mucha conciencia. «No dejemos que el enemigo se apodere de nuestras mentes y pongan a todo un pueblo a comportarse atípicamente cuando lanzan rumores y campañas», expresó.
Señaló que los tres funcionarios de la Embajada de EE.UU. expulsados del país se encontraban conspirando para sabotear la energía eléctrica en el territorio nacional y provocar un caos. “Ellos se fueron con su maleta de dólares a comprar a dirigentes sindicales en Sidor para mantenerla paralizada”, aseguró.
En ese sentido, agradeció a las y los trabajadores de Sidor por retornar a las actividades laborales, sin embargo advirtió al pueblo venezolano que de realizarse nuevamente un paro en la empresa socialista la Gran Misión Vivienda se va a ver afectada.
“Yo le dije en estos días a los dos dirigentes sindicales que han tenido parado Sidor, de manera injusta e ilegal, sobre sus hombros recae que 300 mil familias de Venezuela tengan o no tengan su vivienda este año, si eso llegara a suceder yo no tendría otra opción que mostrarle a ustedes la foto y el nombre de los responsables de este crimen contra el pueblo de Venezuela y de tomar medidas fácticas de acuerdo a la ley”, agregó.