Por los delitos de extorsión agravada y asociación para delinquir|Privados de libertad comandante del Conas de Yaracuy y otros tres GNB por extorsión

El Ministerio Público logró privativa de libertad para el comandante del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) de la Guardia Nacional Bolivariana de Yaracuy, teniente coronel Eduardo José Molina Molina (42), y otros tres efectivos de ese componente militar por presuntamente exigirle a un comerciante la cantidad de 10 millones de bolívares a cambio de devolverle tres vehículos que le habían sido decomisados recientemente en la ciudad de San Felipe.

Los fiscales 69º nacional y el 1º de ese estado, Jhonny Mendoza y Miguel Gómez, respectivamente, imputaron al teniente coronel y a los dos sargentos mayor de segunda, Orlando José León Pérez (37) y Ronald Alexander González Camacho (34), así como al sargento mayor de tercera Darwin Silva Somoza (32) por la presunta comisión de los delitos de extorsión agravada y asociación para delinquir.

La audiencia de presentación se llevó a cabo ante el Tribunal 6º de Control de Yaracuy, instancia que a solicitud del Ministerio Público acordó la medida privativa de libertad contra el comandante del Conas de Yaracuy, así como para los tres sargentos, quienes eran subordinados del teniente coronel.

El tribunal fijó como sitio de reclusión para los cuatro efectivos del Conas la sede de la Zona 4 de ese mismo componente militar, ubicada en San Felipe.

La investigación se inició el 21 de septiembre, día en que la víctima colocó la denuncia ante el Ministerio Público. Luego de una investigación preliminar realizada por parte de los fiscales del caso, fueron solicitadas cuatro órdenes de aprehensión al Tribunal 6º de Control de Yaracuy.

Efectivos de la Dirección General de Contrainteligencia Militar materializaron las detenciones el mismo día, en la sede del Conas de Yaracuy, donde se encontraban los hoy imputados.

T/Ministerio Público
F/Archivo

Si no existiera el temor a la denuncia, pues el fantasma del sicariato ronda, y las autoridades encargadas de impartir justicia actuaran, como en esta oportunidad, otra fuese la realidad la realidad delincuencial en Venezuela, especialmente la cometida por miembros de los componentes militares y paramilitares, que son los que se aprovechan de la autoridad y armamento que le confiere el Estado para ejecutar sus fechorías.

  • Cuando en nuestro país se establezca el degradar públicamente a cualquier componente de la Fuerza Armada, estos delincuente se la pensaran mejor antes de cometer sus fechorías. Un sujeto como estos merece que públicamente sean sometidos a darles de baja , degradarlos y expulsarlos sin derecho a absolutamente nada; pero pareciera que a ninguno de los que dirigen a la FAB, les interesa limpiarla. Todos los días aparecen oficiales de todas las fuerzas involucrados en delitos, son una vergüenza para el País y para el Ejercito Nacional. Lo peor, es que después de ser juzgados y condenados, pasan a retiro, cobran prestaciones, salarios por retiro, caja de ahorro, etc, etc. ! QUE VERGUENZA ¡