Proyecto de investigación “Milagrosas Meliponas” promueve la conservación de la biodiversidad

Las abejas tienen un valor más allá de la miel, debido a que constituyen un factor fundamental para fortalecer el desarrollo de la biodiversidad.

En Venezuela, el Gobierno Bolivariano acompaña el proyecto Milagrosas Meliponas a través del Ministerio para Ciencia y Tecnología (Mincyt), que plantea la divulgación de la ciencia y el despertar el gusto por esta práctica en la comunidad de Sabana Grande, estado Lara, y otras comunidades campesinas de la región.

“El asombro ante la naturaleza, el enamorarse del querer conocer, de ser científico de querer investigar en los territorios es el objetivo fundamental del proyecto Milagrosas Meliponas”, comenta Palmira Guevara Trejo, Bióloga Molecular y jefa del Laboratorio de Genética Molecular del instituto de Biología Experimental (IBE).

La abeja melipona es una especie sin aguijón de la tribu Meliponini que constituyen el nivel más alto de organización social que se da en ciertos animales. La reina pone huevos, las obreras que realizan la mayor parte de las labores de construcción y mantenimiento del nido y los machos son los que fecundan a la princesa, futura reina y contribuyen al trabajo.

Guevara señala que esta propuesta que inició “como un proyecto de divulgación de las ciencias”, está teniendo una proyección importante para la investigación en el país, así como manifestó que “está abriendo un camino para una agenda en trabajo en los polinizadores y en la miel”.

En la actualidad, explicó, “hay varios proyectos de investigación que tienen que ver con la botánica de la miel, con la meliponicultura (…) y yo me siento feliz de que lo que comenzó como una iniciativa se haya expandido a despertar esa agenda de investigación en polinizadores en el Ministerio de Ciencia y Tecnología con el financiamiento de varios proyectos”.

El abordaje en las comunidades campesinas, explica Guevara, consiste en una serie de talleres dedicados a temas científicos que se tratan con profundidad de una manera lúdica, “invitando a todas las familias campesinas a que centre su atención en temas como la biodiversidad”.

Abejas autóctonas

Las abejas nativas sin aguijón, son “las denominamos autóctonas, abejas indígenas (…) las cuales han sido invisibilizadas. En las comunidades visitadas constatamos como las comunidades las conservan para el desarrollo de los bosques”, comenta.

Para Guevara, esta especie de abejas “ha sido milagrosa porque nos ha permitido conocer un mundo de arraigo y de pertenencia”.

Señala que, en estos momentos, existe una diversidad maravillosa de estas especies de abejas. “Tenemos reconocidas más de 90 especies y para mí como persona e investigadora del mundo molecular ha sido abrir los ojos y asombrarme ante la naturaleza de nuestra riqueza autóctona de nuestro país”, puntualizó.

Como política del Gobierno Nacional, el Mincyt a través del Fondo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Fonacit), contribuye en la preservación de la vida en el planeta y la salvación de la especie humana, con el financiamiento del proyecto de Biodiversidad, el bosque local y las abejas nativas denominado, también, como “Milagrosas Meliponas”.

FyF/Mincyt