“Lo que sí quiero decir con meridiana claridad, porque no tiene ningún sentido llevarnos a engaño, es que no voy a autorizar la celebración de ningún referendo que afecte a la unidad de España, a la soberanía nacional y la igualdad de los españoles”, ha asegurado este jueves Rajoy en una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro irlandés, Enda Kenny, con quien mantuvo un encuentro en el Palacio de la Moncloa, Madrid (capital de España).
El jefe del Ejecutivo español ha explicado que no va a autorizar ese referendo por dos razones: la primera, porque no puede y no está «habilitado» para ello; y la segunda porque es algo en lo que no cree.
No obstante, se ha mostrado abierto a dialogar sobre los asuntos que preocupan a los catalanes. En este sentido, Rajoy ha instado al presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, a acudir el próximo martes a la Conferencia de Presidentes Autonómicos, también conocida como “Cumbre Autonómica” que se celebra en el Senado.
“Me gustaría que se diera un primer paso, que es la asistencia a la Conferencia de Presidentes, que no se dejara la silla vacía porque cuando uno deja la silla vacía, otro acaba opinando por él”, ha indicado.
El jefe del Gobierno catalán aseguró en diciembre del año pasado que el referéndum sobre la independencia se celebrará en 2017 “de manera indefectible” y que bastará el 50 % más uno de los votos a favor para declarar la autodeterminación de forma unilateral.
Contra estas afirmaciones, el Gobierno de España niega la posibilidad de que se realice tal consulta independentista. A este respecto, el Tribunal Constitucional (TC) español acordó tramitar la petición del Ejecutivo central de que se anule la resolución del Parlamento sobre dicho referéndum.
Una reciente encuesta publicada el lunes por el diario catalán La Vanguardia dio a conocer que el 76,6 % de catalanes es favorable a la celebración de un referéndum independentista en Cataluña y un 59,1 % quiere que sea pactado con el Gobierno español.