Los documentos de nominación de Pervez Musharraf hacia las elecciones de mayo fueron rechazados por las autoridades de la ciudad de Kasur, una de las cuatro por las que el expresidente pakistaní planea presentar su candidatura.
Un abogado de la localidad, Javed Kasuri, objetó la postulación del exgobernante fundándose en los artículos 62 y 63 de la Constitución, que establecen las normas de calificación y descalificación de los candidatos al Majlis-e-Shura (parlamento), indicó la versión digital del diario Dawn.
Situada junto a la frontera con la India y una de las ciudades más antiguas del país, Kasur fue la primera opción de Musharraf, pero aún puede tramitar su petitoria por las de Islamabad (la capital), Karachi y Chitral.
Medios políticos y de prensa comentaron que sus posibilidades se verán mermadas por otras circunstancias, entre ellas el intento de descalificación que también hoy emprendió la Liga Musulmana de Pakistán- Nawaz (PML-N).
Un diputado de ese partido, Ahsan Iqbal, solicitó a la Comisión Electoral invalidarlo por su presunta implicación, cuando fue presidente, en cuatro casos por los que se había librado orden de detención contra él.
Estos son los de supuesta negligencia en la protección a la exprimera ministra Benazir Bhutto, a la postre asesinada en diciembre del 2007; el asesinato de un líder tribal en agosto del 2006; el asalto a una mezquita durante el cual murieron decenas de estudiantes; y la desaparición de cientos de personas.
Luego de cuatro años de autoexilio, Musharraf regresó al país el pasado 24 de marzo con la intención de participar en las elecciones generales del 11 de mayo en representación de su partido, la Liga Musulmana de Pakistán.
Unos días después, el Ministerio del Interior de Pakistán ordenó a las autoridades de inmigración impedirle salir del país sin un permiso especial que solo puede expedir el mismo tribunal que dictó orden de restricción contra él por considerarlo sujeto a investigaciones en aquellos casos.
El exgobernante, además, ha sido amenazado de muerte por los talibanes, quienes antes de su regreso anunciaron tener listos un escuadrón suicida y francotiradores para liquidarlo.
Musharraf accedió al poder mediante un golpe de estado en 1999 y dimitió en el 2008 para evitar un juicio político.