De cara a la candidatura presidencial de Estados Unidos en 2012|Republicanos a la ofensiva contra Obama

La promesa de crear empleos, reforzar la seguridad fronteriza y los ataques a la reforma sanitaria dominan hoy el escenario de debate de los aspirantes republicanos a la candidatura presidencial de Estados Unidos en 2012.

Durante un contrapunteo organizado por la cadena de televisión NBC y el diario Político en la Biblioteca Presidencial Ronald Reagan, en Simi Valley (California), los ocho aspirantes intentaron anoche mostrar sus cartas sobre el tema.

Sin embargo, la discusión fue casi un cara a cara entre Rick Perry, gobernador de Texas, y Mitt Romney, exgobernador de Massachusetts.

Ambos contendientes son los mejor situados en las encuestas respecto a las potencialidades para convertirse en el rival del presidente Barack Obama en las venideras elecciones.

El debate marcó un giro en la campaña del Partido Republicano, pues los candidatos se enfrentaron por primera vez desde que Perry entró en la disputa y prácticamente de inmediato ha alcanzado a Romney como favorito en los sondeos de opinión.

Al evaluar la situación económica país dijeron que el problema es Obama, algo en lo que coincidieron el empresario afroestadounidense Herman Cain, el exsenador de Pensilvania Rick Santorum y el legislador de Texas Ron Paul.

También se sumaron a esa crítica el exgobernador de Utah Jon Huntsman, el expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich y la congresista por Minnesota Michelle Bachmann.

El candidato republicano que se enfrentará a Obama se anunciará el 27 de agosto de 2012 en la convención de Tampa Bay (Florida), tras cerrar el proceso de las primarias.

Aún Sarah Palin, exgobernadora de Alaska y candidata a la vicepresidencia en las elecciones de 2008, no ha despejado la incógnita acerca de su posible participación en la pugna por el sillón presidencial.

El debate fue el primero de tres que se realizarán en igual número de semanas. Los republicanos escogieron un escenario que quizás les favorezca: la economía no repunta, la tasa de desempleo se mantiene en un 9,1 por ciento y la popularidad del jefe de Estado hace agua.

Fuente/Prensa Latina