La presidenta electa de Brasil, Dilma Rousseff, comenzó ayer a organizar el proceso de transición con la división de las tareas entre su principal equipo de asesores; esto, antes de tomarse unos días de descanso y preparar sus primeros viajes oficiales, reportaron agencias de noticias.
El vicepresidente electo, Michel Temer, y el coordinador general de la campaña de Rousseff, José Eduardo Dutra, harán la articulación política de transición junto a los diputados Antonio Palocci y José Eduardo Cardozo, informó la asesoría de prensa de la presidenta electa.
“De acuerdo con lo determinado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, los trabajos del equipo técnico de transición serán realizados a partir del día 8 de noviembre”, añadió la nota.
Dutra (quien es también presidente del Partido de los Trabajadores) dijo a la prensa que comenzará a conversar con todos los partidos que apoyaron la elección de Rousseff para conocer sus demandas y su visión sobre el futuro gobierno.
La Presidenta electa “deberá viajar con el presidente Lula la próxima semana, y a su retorno ya podré presentar un panorama general sobre las demandas de los partidos aliados y también como analizan la formación del nuevo gobierno. Así, la Presidenta comenzará a analizar las opciones”, añadió.
Esas discusiones “no se refieren apenas a pedidos para ocupar cargos, sino a cuestiones de prioridades y temas estratégicos. La Presidenta electa es quien decidirá sobre los nombres para los ministerios”, aseguró Dutra.
El equipo de Rousseff ya envió a la Presidencia una lista con unos 30 nombres que integrarán el equipo técnico de transición, como lo determina la legislación.
De cualquier forma, Rousseff ya adelantó que no hará anuncios puntuales sobre nombres de futuros ministros, sino que pretende hacerlo en bloques.
La dirigente ya adelantó que viajará para descansar hasta el próximo fin de semana, cuando comenzará para ella un verdadero maratón de compromisos.
Luego de ese descanso, Rousseff iniciará una serie de viajes, ya que el mandatario Luiz Inácio Lula da Silva pretende incluirla en la delegación que viajará a Seúl para participar de la reunión del G-20 financiero.
En ese viaje, Lula y su comitiva prevén una escala para una visita oficial en Maputo, Mozambique, que se convertiría en el primer país en ser visitado por Rousseff en su carácter de presidenta electa de Brasil.
Luego de la Cumbre del G-20 en Corea del Sur, Lula tiene previsto participar en la Cumbre sobre Clima en Cancún, México, y la cúpula del Mercosur, en Foz de Iguazú, Brasil, entre otras jornadas. Rousseff podría estar en varios de esos eventos.
Lula ha señalado explícitamente que no buscará participar en el gobierno de Rousseff, pero también declaró: “Soy compañero de Dilma, lógico que voy a discutir con ella muchas cosas».
Rousseff asumirá el mando el 1 de enero de 2011, cuando recibirá la banda presidencial de manos de Lula, su mentor político y de quien fue ministra de Energía y luego Jefa de Gabinete.