El pedalista merideño José Rujano, aguantó con todas sus fuerzas los diferentes ataques que le lanzaron los ruteros españoles en la décimo quinta etapa del Giro de Italia, disputada entre Conegliano y Val di Fassa (229 km.), al culminar en la sexta posición a 2 minutos y 35 segundos del ganador del tramo, el vasco Mikel Nieve (7h27m14s), quien llegó escoltado a la meta por el italiano Stefano Garzelli y el madrileño Alberto Contador.
Rujano, sin embargo, avanzó hasta la sexta casilla a 8m39s del puntero en la clasificación general de la competencia que culminará este domingo en Milán. El líder de la carrera es Alberto Contador con registro de 62:14.42.
El también venezolano Carlos Ochoa culminó la etapa en la posición 100, a 33 minutos del ganador y está en la posición 56, a 1:15.54 del “mandamás” de la competencia.
UN TRAMO DIFÍCIL
Para los ciclistas que aun se mantienen activos en la ronda italiana, los cinco puertos de montaña de este domingo se transformaron en un verdadero calvario, pero el merideño Rujano nunca perdió el paso, al contrario dio,nuevamente la gran pelea para amanecer este lunes en la quinta posición de las cuestas con 26 puntos, superado por el italiano Stefano Garzelli (62 unidades), los españoles Mikel Nieve (39) y Alberto Contador (38) y el italiano Giamluca Brambilla (27).
No obstante, en el ciclismo las etapas de alta montaña son tramos en los que los equipos planifican estrategias en base a los ruteros llamados escarabajos. Por supuesto, en determinadas zonas de la carrera se lanzan algunos especialistas en esa topografía, quienes tratan de conseguir triunfos parciales y luego vuelven a rezagarse.
Empero, esos ataques y contraataques sirven para diezmar la resistencia de los favoritos. Así trabajaron ayer los equipos españoles con la finalidad de acabar con la potencia de Rujano, pero éste aguantó con estoicismo todas esas intentonas.
La estrategia que le dio el técnico del equipo Androni Giocattoli, Gianni Savio, ha sido que no le afloje la rueda a Alberto Contador, que se le pegue como una garrapata y el andino ha cumplido al pie de la letra, claro hasta dónde ha podido soportar.
Ayer, faltando unos seis kilómetros para el final, Contador prendió los motores y dejó regado a Rujano, quien no pudo aguantar ese último ataque, por lo que llegó a la meta con 2:35 del ganador, pero a un minuto y fracción de Contador.
“Fue una etapa muy difícil. Le dí con toda mi fuerza, pero no pude aguantar el ritmo de Contador, quien se vio beneficiado por el apoyo que le brindan todos los españoles”, argumentó Rujano.
“Yo en la montaña estoy peleando prácticamente solo, pero sigo adelante y todavía quedan tramos empinados para tratar de escalar posiciones”.
El lunes será una jornada de descanso para los 166 pedalistas que aun se mantienen en competencia y mañana está prevista la disputa de la etapa 16, una contrarreloj individual de 12,7 kilómetros entre Belluno y Nevegal.