El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, denunció este martes que potencias extranjeras y la oposición Siria impiden el cumplimiento del plan de paz del enviado especial de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan. Afirmó que el Consejo Nacional Sirio (CNS) incita a la guerra civil con sus llamamientos a “continuar la lucha por la liberación”.
El titular destacó a la prensa de su país que desde el extranjero “intentan ejercer presión sobre el Consejo de Seguridad de la ONU (…) Nos preocupa que algunos países comiencen a utilizar atentados terroristas como excusa para presentar demandas sobre la necesidad de medidad militares en Siria”.
El canciller aseguró que las potencias que respaldan a la oposición actúan como si las Naciones Unidas ni hubieran ordenado la investigación por lo ocurrido en la localidad de Houla, ciudad ubicada en la provincia de Homs (oeste), donde 116 personas fallecieron y cerca de 300 resultaron heridas el pasado fin de semana.
Advirtió que el conflicto sirio ya afecta a otros países de Medio Oriente, como el Líbano, por lo que llamó a las potencias a «mostrar la máxima responsabilidad y no echar leña al fuego sino, al contrario, intentar sofocarlo y sentar a las partes a la mesa de negociaciones».
En referencia a las recientes declaraciones del líder del CNS, Burhan Ghalioun, el diplomático subrayó que “estamos desconcertados ante el llamado a todas las fuerzas opositoras a continuar la lucha por la liberación hasta que el Consejo de Seguridad de la ONU no de luz verde a una intervención armada externa”.
Afirmó que se trata de una “incitación explícita a la guerra civil” por parte del CNS en el marco del cual “algunos países de la región quieren agrupar a toda la oposición siria”. Agregó que estos intentos se contradicen con el plan de Annan, que está dirigido a unir a la oposición en una plataforma de diálogo con el Gobierno.
Serguei Lavrov tambien hizo referencia al problema de los refugiados como otra excusa que puede ser utilizada por las potencias extranjeras para exigir al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que apruebe las operaciones militares en el país árabe.
“Se intenta mostrar este asunto como si en caso de que no se creen corredores humanitarios, colchones de seguridad, el problema no puede ser resuelto”, expresó.
El jefe de la diplomacia rusa adelantó que hablará la tarde de este martes por teléfono con Annan para conocer los resultados de su visita a Damasco, donde se reunirá con el presidente Bashar Al Assad.
En la víspera la Cancillería de Rusia demandó una exhaustiva investigación de las muertes registradas en la localidad siria de Houla y destacó lo importante para Moscú no es quién está en el poder en Damasco, sino el fin de la violencia.