El embajador ruso ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Vitali Churkin, develó parte de un pacto sellado que Rusia y Estados Unidos (EEUU) mantienen sobre Siria. Hasta el momento Washington se ha negado a revelar información al respecto.
El pacto suscrito el 9 de septiembre por los jefes de la Diplomacia de Moscú, Serguei Lavrov; y de EEUU, John Kerry, sentó las bases para un cese de hostilidades en Siria, el cual entró en vigor el 12 de septiembre e incluye cinco documentos que deben establecer los pilares del proceso político en Damasco.
El rechazo de la nación norteamericana de hacer público el pacto sobre Siria ni siquiera ante los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), pone en el peligro la emisión, por parte del organismo, de resoluciones que apoyen dicho pacto; es por ello que Churkin leyó este sábado dos fragmentos del acuerdo secreto entre ambos países.
El primer fragmento, leído tras una sesión urgente del CSNU, expresa la disposición de ambos lados de emprender esfuerzos conjuntos a fin de estabilizar la situación en Siria, en particular en la región de Alepo (norte de Siria), una de las ciudades más afectadas. Además, menciona que establecerán distinción entre las fuerzas de la oposición y las fuerzas del grupo terrorista Frente Fath al-Sham (antes Frente Al-Nusra).
El segundo fragmento se refiere al Grupo Conjunto de Implementación, el cual tiene como objetivo “facilitar una amplia coordinación” entre Moscú y Washington para derrotar a los terroristas del Frente Fath al-Sham y del autodenominado Estado Islámico (Daesh en árabe). También debe respaldar el proceso de transición política en el país árabe.
Churkin señaló que se tenía previsto que el mencionado Grupo Conjunto comenzara sus misiones a partir del 19 de septiembre. “Por eso, si EEUU quería realizar un bombardeo contra Al-Nusra o el Daesh en Deir al-Zur (este de Siria) o cualquier otro lugar, podía esperar dos días más y coordinar sus acciones con nuestros militares”.
EN CONTEXTO
Este sábado la coalición liderada por Washington realizó un ataque contra las posiciones del Ejército sirio en Deir al-Zur que dejó al menos 62 militares sirios muertos. Churkin consideró esta operación “irresponsable”. EEUU señaló que fue “no intencional y un error”.
Vladimir Putin, el mandatario ruso, por su parte, ha asegurado este sábado que EEUU no desea que ni la comunidad internacional ni los estadounidenses sepan detalles de este acuerdo para no mostrar que está incumpliendo su parte del trato en el marco del plan de paz de Siria.