Con el respaldo de más de 1,5 millones de nicaragüenses, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) obtuvo mayoría parlamentaria calificada durante las elecciones celebradas el domingo pasado para elegir a los representantes ante la Asamblea Nacional y el Parlamento Centroamericano (Parlacen).
El voto popular favoreció con 60,57% a los diputados departamentales del FSLN, 60,76% a los diputados nacionales y 60,86% a los diputados al Parlacen, informó el Tribunal Supremo Electoral de Nicaragua.
Tras conocerse los resultados, el líder sandinista Daniel Ortega dijo: «Vamos a trabajar para que la Asamblea Nacional sea un instrumento que le sirva al pueblo, a los trabajadores y a los nicaragüenses. Vamos a legislar con consenso».
Ortega logró la reelección con el respaldo de 1.524.146 de nicaragüenses, lo que representa 62,66% del universo electoral.
Durante los últimos cuatro años el sandinismo consolidó más de 35 programas sociales y económicos para enfrentar 16 años de políticas neoliberales, que dejaron a 70% de los nicaragüenses en situación de pobreza.
Las premisas de la izquierda se fundamentan en la creación de instrumentos que favorezcan las políticas de inclusión social y distribución equitativa de las riquezas.
En 2010, Nicaragua alcanzó un índice de reducción de desigualdad de 9,8%, el segundo del hemisferio, solamente superado por Venezuela, con 15,9%, de acuerdo con el informe anual de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).