El presidente colombiano|Santos le reclamó a las FARC que jueguen limpio en diálogo por la paz

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, reclamó a las FARC que reconozcan a sus víctimas y no pidan “cosas imposibles” en el diálogo con el gobierno que llevan adelante desde noviembre pasado en busca de un acuerdo de paz.

“Le hemos dicho a las FARC: tienen que reconocer a las víctimas como núcleo en esta negociación”, afirmó Santos durante un acto con víctimas de la violencia en el municipio El Carmen de Bolívar, en el norte del país.

Subrayó que para alcanzar un acuerdo de paz es necesario que la contraparte “entienda, exprese su voluntad y juegue limpio”, y no pida “cosas imposibles”, porque de lo contrario no se podrá llegar a “buen puerto”, informó la agencia de noticias EFE.

“No comiencen pidiendo cosas imposibles que nadie les va a conceder, que no están dentro de los acuerdos”, remarcó el mandatario al comentar la intención del grupo guerrillero de no entregar las armas una vez que se llegue a un acuerdo que ponga fin al conflicto.

“Queremos que entreguen las armas pero que sigan combatiendo con argumentos, que cambien las balas por los votos”, manifestó Santos, quien prometió que el Estado dará a los guerrilleros “todas las garantías y todos los espacios” para que ingresen en un sistema democrático.

Asimismo, el jefe del Estado advirtió que “la paciencia del pueblo colombiano no es ilimitada”, en relación con el escepticismo que, según algunas encuestas, vastos sectores de la sociedad tienen respecto de la real voluntad de paz de las FARC.

Los delegados del gobierno y las FARC dieron por concluido el viernes pasado el primer ciclo de conversaciones acerca de la inserción de los guerrilleros en la vida política en caso de un acuerdo de paz, el segundo de los cinco puntos de la agenda del diálogo iniciado en La Habana en noviembre pasado.

Texto/ Télam

Santos no quiere paz, es «pura paja». No le conviene y lo ha demostrado. Si el emperador negro le ordenara en este mismo instante atacar a Venezuela, no le temblaría el pulso y le sobraría tiempo; es su naturaleza y nadie se la va a cambiar. El fascismo es un pandemia difícil de extinguir, el capitalísmo es su sustento innegable, y se complementan para desesperanza de la humanidad. Mientras muchos paises de latinoamérica tratan de integrarse para «delastrarse» de la mierda, el emperadorcito de Colombia disfruta embarrarse con ella, y le produce orgasmos si es excremento gringo o sionísta.

El presidente Maduro seguirá en su empeño de negociar con Colombia, pero es bueno también en fortalecer más nuestras Fuerzas Armadas, con un poder de disuasión que no le quede duda al «hermano» que en plena negociación que le conviene, está pensando como de nuevo «lastimar» a Venezuela.