El condado de San Luis, estado de Misuri, Estados Unidos, anunció que el estado de emergencia decretado el pasado lunes en la localidad de Ferguson se mantendrá por 24 horas más para evitar nuevas protestas y hechos violentos.
La referida ciudad recobró por completo la tranquilidad, luego que la noche de este miércoles continuaran las protestas por el asesinato del joven afroamericano Michael Brown, hace un año, a manos de un policía.
El decreto de estado de emergencia implica que es la Policía del condado de San Luis la que está encargada de garantizar la seguridad, reemplazando en esa tarea a los agentes locales, que han sido cuestionados por supuestas prácticas violentas y discriminatorias contra la mayoría de la población afrodescendiente de Ferguson.
El 9 de agosto de 2014, Brown, de 18 años de edad, fue asesinado por el policía de piel blanca Darren Wilson en la referida ciudad estadounidense.
Según la «versión oficial» del hecho, Wilson propinó los disparos a Brown luego que el joven supuestamente tratara de arrebatarle su arma de reglamento.
No obstante, testigos también han señalado que al momento del brutal ataque, el joven se encontrada desarmado y con las manos en alto.
El caso fue llevado por el Gran Jurado de Missouri, que falló a favor de Wilson y lo dejó en libertad, a pesar de que se reconociera que el efectivo había disparado contra Brown, alegando que «la ley autoriza a un oficial a usar la fuerza letal en ciertas circunstancias y para defenderse de ciertas situaciones».
En los últimos años, varios afroamericanos han sido víctimas de asesinatos raciales en Estados Unidos, ante la mirada indiferente de las autoridades, hecho que ha provocado movilizaciones de calle y protestas para exigir justicia.
En febrero de 2012 fue asesinado en Sanford, Florida, el joven Trayvon Martin, de 17 años de edad, por un guardia de seguridad quien lo consideró «sospechoso».
El 30 de abril de 2014, el policía Christopher Manney disparó 14 veces contra Dontre Hamilton, de 31 años, quien estaba desarmado.
En tanto que en julio, Eric Garner, de 43 años, murió luego de ser estrangulado por el policía blanco Daniel Pantaleo.
En la lista de asesinatos también está el afroamericano Darrien Hunto, de 22 años de edad, quien murió cuando funcionarios de la policía de Utah le propinaron seis disparos.
Tamir Rice, de 12 años de edad, fue tiroteado por la Policía en Cleveland, estado Ohio (norte), cuando el niño se encontraba en un parque de la ciudad y sacó una pistola de juguete, mientras que Antonio Martin, de 18 años de edad, fue asesinado por agentes de la Policía en San Luis, cerca de Ferguson.