Investigadores activan alarmas|Sepa por qué hay tantos sismos en Santiago de Cuba

En la provincia de Santiago de Cuba ha ocurrido en los últimos días una actividad sísmica anormal que activó la alarma entre los investigadores meterológicos de la nación, dada la intensidad de cada movimiento telúrico pues, en Cuba se registra en un año aproximadamente 10 eventos con magnitud superior a cuatro y en esta ocasión alcanzó la magnitud cinco.

Del 17 al 21 de enero, se reportaron alrededor de 500 sismos en la costa oriental de Cuba, al menos 19 fueron perceptibles, y gran parte tuvo su epicentro a 40 kilómetros de la ciudad de Santiago, situación que lleva a las autoridades a preguntarse, ¿por qué tantos?

Según el coordinador del programa nacional para el desarrollo de Investigaciones Sismológicas Aplicadas (DISA) de Cuba, Fernando Guasch, obedece a la gran brecha de tierra que existe paralelo a la costa oriental de la nación antillana.

“(…) que es el sistema de falla transformante Bartlett Caimán. Esa estructura tectónica es activa y tiene un potencial sísmico capaz de generar fenómenos geológicos de hasta una magnitud de ocho, razón por la cual movimientos telúricos en el orden de cuatro y cinco sencillamente nos expresan un incremento de la actividad sísmica; pero prácticamente no son determinante en el potencial de peligros de esa estructura”, señala el experto, citado por CubaDebate.

Guasch explica que los movimientos registrados hasta la fecha se han concentrado en una pequeña área ubicada en las inmediaciones de la playa de Caletón y a unos 40 kilómetros de Santiago.

El riesgo está latente “ya que en un análisis de la memoria histórica en este mismo sitio ocurrió uno en 1766 con magnitud aproximada de 7.6, energía suficiente para generar ondas sentidas hasta La Habana”, acotó el sismólogo.

Los temblores remecen Santiago porque en Cuba los sismos son de origen tectónico, relacionados a estructuras geológicas activas.

“Reconocemos tres tipos, los que están asociados al límite de placas entre la de Norte América y el Caribe, que es el de entre placas. Luego hay una zona que se ve afectada por este límite de placa, que es el que llamamos terremotos de interfase y por último los que suceden en el interior de placa”, indicó Guasch.

Los sismos que se esperan están asociados con el límite de placas de Norte América y el Caribe. “Por eso nosotros como sismólogos decimos que el sistema de falla transformante Bartlett Caimán es la principal zona de origen de terremotos de Cuba”, asegura el experto.

Esta urbe de más de 630 mil habitantes debe establecer medidas de prevención a causa de la memoria sísmica histórica. Guasch afirma que el grado de conocimiento y estimación que tenga la población del nivel de peligro que corre determinará su capacidad de protección.

“Los terremotos fuertes en Cuba ocurren cada 60 u 80 años, y hoy en día son pocas las personas en esta ciudad que recuerdan lo vivido la noche del 3 de febrero de 1932, cuando el temblor provocó más de una docena de fallecidos”, resaltó el sismólogo.

Enfatizó por otro lado, en que en los sistemas de educación formal desde la escuela se debe contextualizar el riesgo de la zonas donde “vivimos, de ahí que la preparación es fundamental para actuar correctamente”.

Guasch insiste en que es necesario saber que pueden los niños en las escuelas o los mayores. “Definir un punto de encuentro; cuál es la documentación que debe tener; preparar un botiquín con los medicamentos más útiles y otras cuestiones que nos permitirá un nivel de supervivencia”, recalcó el experto.

Cuba cuenta con un servicio sismológico nacional que se equipara con los de estándares internacionales. En el trabajan más de 10 doctores en ciencia y 17 investigadores.

Fuente/Telesur