Aseguró este viernes el técnico de Uruguay|Con el severo castigo a Suárez se buscaba un chivo expiatorio, afirmó Tabárez

La decisión de la FIFA de expulsar al delantero Luis Suárez del Mundial Brasil-2014 «es de una severidad excesiva», aseguró este viernes el técnico de Uruguay, Óscar Tabárez, e indicó que con el fallo se buscaba «un chivo expiatorio».

«Con este fallo ¿quién gana?, ¿quién pierde?, ¿quién se benefició?, ¿quién sale perjudicado?, ¿quién se ha salido con la suya? A una de las preguntas no le voy a dar una respuesta contundente pero sí algún matiz. ¿Se evitarán a partir de este tipo de decisiones tan severas todos los excesos? Lo dudo mucho», dijo Tabárez en una nutrida rueda de prensa en el estadio Maracaná de Rio de Janeiro.

La FIFA expulsó al astro uruguayo del Mundial el jueves al suspenderlo por nueve partidos oficiales por morder al defensor italiano Giorgio Chiellini, una severa sanción que incluye además cuatro meses de prohibición para desarrollar actividades vinculadas con el fútbol y una multa de 112.000 dólares.

«Es una decisión que evidentemente está mucho más volcada hacia las opiniones de la artillería mediática que explotó inmediatamente de que terminó el partido», por la tercera fecha del Grupo D y en el que se impuso la celeste por 1-0 para obtener el pase a los octavos.

«Así como está cerca esa presión mediática, está bastante alejada del trato objetivo que presentan las imágenes de las acciones en el partido referido. Todos saben que (Suárez) fue sancionado y cumplió las sanciones. Pese a eso, hay acosos que parecen eternos», remarcó.

Es la tercera vez que Suárez muerde a un rival durante un partido, tras hacerlo en 2010 en la liga holandesa (fue sancionado con siete partidos) y en abril de 2013 en la Premier League (castigado con 10 encuentros).

«Todos sabemos dónde está el poder. Eso no se discute, que el poder lo tenga el organizador. Pero eso no quiere decir aceptar el uso indiscriminado de ese poder. Sobre todo por el órgano que debe impartir justicia. Como entrenador, como docente que he sido, se me presenta la teoría del chivo expiatorio», fustigó el veterano entrenador.

Tabárez reconoció que Suárez cometió un error y que merecía un castigo, pero advirtió que «hay un peligro y se olvidan que el chivo expiatorio es una persona, que tiene derechos y que además de las equivocaciones, le ha hecho muchos aportes desde dentro del campo».

T/AFP