Este lunes, el presidente del Sindicato Único Socialista de Empleados y Funcionarios Públicos de la alcaldía de Maracaibo, José Delghans, denunció que efectivos de la Policía Municipal de Maracaibo (Polimaracaibo) no les permitieron el acceso a las oficinas donde funcionan los sindicatos socialistas, ubicada en la antigua sede del Servicio Autónomo de Gas, en la capital zuliana.
«Somos tres organizaciones sindicales a las que se nos ha violentado nuestros derechos: el Sindicato Único Socialista de Empleados y Funcionarios Públicos, al sindicato del Instituto Municipal del Aseo Urbano y al Sindicato del Servicio Autónomo de Gas (Sagas)», apuntó Delghans, acompañado de un grupo de empleados del ayuntamiento marabino.
La acción de Polimaracaibo, denunció el líder sindical, fue hecha por órdenes directas de la alcaldesa Evelyng Trejo de Rosales.
El problema de fondo, según manifestó Delghans, es que este año se debe ejecutar, por mandato de la Ley Orgánica del Trabajo, la incorporación de más de 1.500 trabajadores tercerizados a la nómina ordinaria de la Alcaldía de Maracaibo, con todos los derechos que establece la misma.
«Hemos recibido un golpe de Estado como ellos están acostumbrados a dar, pero nosotros seguiremos luchando y trabajando por los derechos de los trabajadores», aseguró Delghans, quien anunció que se dirigirán a la Fiscalía y ante los tribunales para realizar la denuncia por secuestro, allanamiento de morada y violación a los derechos humanos y sindicales.