La tarde de este martes, los músicos de la Orquesta Sinfónica de la Juventud Guariqueña Antonio Estévez conquistaron al público caraqueño en el concierto que la agrupación ofreció en la sala Simón Bolívar del Centro de Acción Social por la Música, en la ciudad capital.
Ataviados de negro, y bajo la batuta del maestro Jesús Morín, los jóvenes artistas del estado llanero recibieron sonoras ovaciones por la muestra de técnica y ejecución de un recital que se paseó por diversas obras emblemáticas de la música contemporánea mundial.
Pasadas las 5:00 de la tarde, los músicos arribaron al escenario en compañía de su director para romper el silencio con la interpretación de la pieza Aria para soprano y orquesta Ah, Pérfido, que estuvo a cargo de la soprano Erika Ochoalcalá, quien con su potente voz se adueñó del recinto y de los aplausos.
La presencia de los maestros José Antonio Abreu y Gustavo Dudamel en el recinto despertaron las pasiones de los asistentes, quienes en un gesto de cariño regalaron ovaciones a las representativas figuras del Sistema de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela.
Posteriormente, y con un grupo de más de 40 artistas, la orquesta regresó al escenario, esta vez junto al violinista Jesús Pinto, en el violonchelo Edgar Alfonzo y en el piano David Ascanio para interpretar la pieza Triple concierto para violín, violonchelo y piano en Do Mayor, de Ludwing van Beethoven.
Los vítores y largas ovaciones se hicieron presentes nuevamente en la sala Simón Bolívar, mientras los jóvenes hacían reverencias para agradecer al concurrido público que no dejó de alabar la presentación orquestal.
Para el cierre de la jornada, los acordes se hicieron sentir con la melodía de la Sinfonía Nº 10 en mi menor del compositor ruso Dimitri Shostakovich.
Perteneciente al Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, la orquesta de Guárico, desplegada en diversos municipios de la región llanera, impulsa y capacita a los jóvenes de la entidad en el arte musical.
En 2007, bajo la guía del maestro Jesús Morín, se funda la Orquesta Sinfónica de la Juventud Guariqueña Antonio Estévez, la cual ha reforzado los estudios musicales de los jóvenes músicos en sus núcleos La Pascua, Altagracia, Calabozo I, Calabozo II, San Juan, Tucupido, y Zaraza.
Dentro de sus labores de formación artística, la orquesta guariqueña también impulsa el Proyecto Alma Llanera, caracterizado por la formación de jóvenes en la interpretación y ejecución de los instrumentos autóctonos de la región llanera como: arpa, cuatro, maraca, bandola y guitarra.