Siria denunció este lunes ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) la agresión de grupos extremistas islámicos (takfiristas) contra la nación árabe, y señaló que estas acciones están dirigidas contra el patrimonio cultural e histórico sirio, informó Prensa Latina.
En cartas idénticas dirigidas a la Presidencia del Consejo de Seguridad y a la Secretaría General del organismo, la nación árabe señala que tras los decretos emitidos por jeques patrocinados por países como Catar y Arabia Saudita, organizaciones vinculadas a Al-Qaeda realizan atentados terroristas suicidas y ataques contra barrios residenciales.
En el texto, el Ministerio de Exteriores y Emigrantes manifiesta su preocupación por la participación de grupos radicales contra los cristianos y los sirios en la región, y el silencio que guardan las naciones que dicen apoyar la paz y la solución del conflicto árabe.
Siria apuesta, además, a que naciones como Arabia Saudita, Catar, Turquía y Francia, entre otras, dejen de ofrecer ayuda militar, financiera y logística, así como el adiestramiento y albergue a los grupos extremistas, añade el texto.
Sostiene que para preservar la diversidad religiosa y cultural en Siria, es necesario luchar contra el pensamiento takfirista y generar presión internacional sobre los países que apoyan a los grupos terroristas. También reitera que la solución al conflicto debe darse por vía del diálogo y las elecciones.
Siria es víctima de la violencia terrorista desde hace más de dos años y medio. Las autoridades de la nación árabe han denunciado que los mercenarios son enviados y apoyados desde el extranjero.
Este lunes la ONU informó que la II Conferencia Internacional sobre Siria tendrá lugar en Ginebra, Suiza, el 22 de enero de 2014.