Columna Seguridad de los derechos |Snowden y los DDHH (Opinión)

1. Edward Snowden está denunciando violaciones a los derechos humanos por parte del Gobierno de Estados Unidos, en especial el derecho a la privacidad de todos los ciudadanos del mundo, y eso no puede ser un delito. El derecho a la información y a la libertad de expresión lo protegen.

2. La revelación de ciertas informaciones de Estado se justifican si las mismas velan por el interés público, especialmente si con ellas se denuncia y evitan que se produzcan violaciones graves de DDHH, como por ejemplo, una situación de vigilancia excesiva o injustificable.

3. Snowden corre peligro de sufrir malos tratos, penas de prisión prolongadas y graves violaciones a sus DDHH si es extraditado a EEUU, país conocido por ese tipo de prácticas.

4. La revocación de su pasaporte por parte de EEUU viola sus derechos a la libertad de circulación y de solicitar asilo. Por lo que inicialmente se discutía la necesidad de un salvoconducto de viaje para poder salir de Rusia; sin embargo, con el antecedente de la agresión en contra de Evo Morales y las amenazas a diversos gobiernos por parte de EEUU, esta posibilidad ha sido, por ahora, descartada, ya que no existen garantías de que un vuelo hipotético a América Latina pueda llegar a su destino. El problema no es jurídico, es militar. Es por ello que Snowden decide hacer nuevamente la solicitud de asilo a Rusia, esa era su opción más segura.

5. La extradición por motivos políticos está prohibida.

Este caso desvela la importancia de repensar al derecho internacional y su vínculo con la protección efectiva de los DDHH; las garantías y derechos individuales deben hacerse realmente efectivos en este tipo de casos, tanto para Snowden como para los millones de ciudadanos del mundo.

En este contexto es muy acertada la propuesta de Mercosur de promover en las instancias multilaterales la adopción de normas para garantizar la protección de las comunicaciones, que preserven la soberanía de los Estados y la privacidad de los individuos.

Ojalá toda esta matriz sirva para plantearse actitudes “retrotecnológicas” en ciertas áreas de nuestras vidas, en esta época en la que predominan los aparatos inteligentes y las personas estúpidas, en la que encantada y desgraciadamente le hacemos el trabajo al “gran hermano”; dopados con propaganda antiterrorista, sacrificamos nuestros derechos en procura de una falsa seguridad.

T/ Keymer Ávila
@Keymer_Avila