Un soldado israelí amenazó y golpeo sin motivo a un grupo de trabajadores palestinos que se encontraba en las inmediaciones de los ilegales asentamientos sionistas, en territorios ocupados de Palestina.
Imágenes reveladas en un programa de televisión de Israel muestran cuando el soldado, vestido de civil, sacó de la maleta de su vehículo un fusil de guerra con el que amenazó y agredió a los palestinos.
Los responsables del espacio aseguraron que la versión original dura cerca de 10 minutos en las cuales se aprecia como el uniformado “desata su furia” sin contemplaciones contra el grupo de trabajadores.
De acuerdo con el reportaje, los trabajadores denunciaron al soldado que fue declarado culpable por la justicia israelí. Sin embargo, la condena fue leve: dos meses de cárcel y cuatro de servicios comunitarios.
Según la ONG Rompiendo el Silencio, los maltratos contra ciudadanos palestinos son “un comportamiento habitual entre los soldados” sionistas.
En marzo pasado, un video difundido por medios internacionales muestra a un soldado de Israel bailando alrededor de una ciudadana palestina esposada y con los ojos vendados.
Este vídeo salió a la luz pocos meses después de que en la red social Facebook se publicarán fotos de la soldado israelí en la reserva Eden Abergil, en las que posaba alegremente junto a palestinos detenidos, esposados y con los ojos vendados.
En esa ocasión el Ejército israelí señaló que era un caso “excepcional” que contradecía los valores de las Fuerzas de Defensa, aunque la existencia de estos hechos fueron denunciadas en reiteradas ocasiones.
En referencia al comportamiento del Ejército sionista, un tribunal israelí condenó en marzo pasado a dos uniformados por haber empleado a un niño palestino de 11 años de edad como escudo humano.
Los soldados llevaron a acabo esta acción para registrar varias bolsas que sospechaban que podían contener bombas.
El incidente ocurrió en enero de 2009, durante la operación Plomo Fundido, la ofensiva militar israelí contra la Franja de Gaza en la que murieron mil 400 palestinos y 13 israelíes.
Esta ofensiva militar inició en diciembre de 2008 con el pretexto de frenar el lanzamiento de cohetes disparados supuestamente desde la frontera contra ciudades israelíes. Este ha sido el ataque más sangriento en la región desde la Guerra de los Seis Días, en 1967.