Aunque para este jueves estaba previsto que la comisión electoral de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) proclamara a Carlos Ocariz como candidato opositor para la gobernación de Miranda, el acto fue suspendido por las impugnaciones.
También se suspendió por esa misma razón la proclamación de los 21 candidatos de la derecha a las alcaldías del estado Miranda, que fueron electos en las primarias del domingo pasado, informó Globovisión en una nota.
El precandidato Rómulo Herrera solicitó la impugnación del proceso, según las normas acordadas por la MUD, por lo que se espera una respuesta al reclamo, reseñó en la página web diario Últimas Noticias.
Según ese rotativo, la suspensión se realizó en horas de noche de este miércoles, ante la existencia de reclamos en los municipios Guaicaipuro y Sucre.
El portal revela que los partidarios de Herrera advierten sobre presuntas inconsistencias en los resultados de las mesas del Colegio Universitario, la Unidad Educativa Boyacá y en la parroquia Paracotos.
Por su parte, el precandidato por el municipio Sucre William Ojeda informó que posiblemente este jueves se dirigirá al país para dar a conocer las bases de su reclamo. Los cómputos de las primarias dieron como supuesto ganador de esa jurisdicción a Juan José Caldera, de Primero Juticia (PJ).
De acuerdo con Últimas Noticias, Ojeda solicita la revisión del conteo de actas, pues la diferencia con Caldera sería de unos 700 votos.
Entretanto, el precandidato por el municipio Libertador Antonio Ecarri pidió revisión «dentro de las normas acordadas» por la alianza de derecha.
Desde el lunes pasado, varios aspirantes de la derecha que se midieron en las elecciones internas denunciaron irregularidades en el proceso electoral, en el cual no se utilizaron captahuellas y la tinta indeleble no era obligatoria.
Uno de los primeros fue el precandidato a la alcaldía del municipio Bruzual (Yaracuy) Rafael Velásquez, quien pidió la revisión de los cuadernos de las elecciones e introdujo un amparo ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
«Tengo todo el derecho a pedir que se revisen los cuadernos», expresó Velásquez. «Hubo irregularidades, yo mismo observé una mesa donde había más votos que electores», denunció.
El máximo tribunal ordenó la no destrucción del material electoral pero la decisión fue desoída por la oposición, que procedió a incinerar de inmediato los cuadernos electorales, por lo cual será imposible determinar si hubo o no delitos en los actos de votación.