El Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos informó este lunes que en las últimas horas el huracán Tomas disminuyó su fuerza y se convirtió nuevamente en una tormenta tropical con vientos de 100 kilómetros por hora, pero mantiene su amenaza de aumentar su intensidad mientras se dirige hacia a Haití y República Dominicana.
A las 03H00 GMT de este lunes, el CNH emitió un boletín en el que informó que Tomas se movía en dirección oeste a 24 kilómetros por hora y estaba situado a 425 kilómetros al sur de Puerto Rico.
El CNH ha pronosticado para las próximas 48 horas un debilitamiento de la velocidad de los vientos de Tomas . Sin embargo, a partir del próximo jueves según la trayectoria de la tormenta tropical podría de nuevo convertirse en un huracán, dirigirse al norte y llegar a Haití y República Dominicana.
Tras este anuncio, las autoridades de Haití emitieron una alerta naranja, el segundo más alto en su escala, ante la posible llegada de la tormenta tropical, que se prevé ocurra el próximo jueves.
«Hemos emitido un llamamiento para la evacuación voluntaria, en particular para los campamentos», explicó este domingo el director de la Oficina de Protección Civil de Haití, Alta Jean-Baptiste.
En Haití temen lo peor si Tomas llega a golpear a la nación caribeña, donde cientos de miles de personas tienen sólo refugios rudimentarios casi 10 meses después del terremoto de magnitud 7,3 registrado el pasado 12 de enero, que cobró la vida de unos 300 mil haitianos, mientras dos millones quedaron damnificados.
La situación también se hace preocupante para este país, donde al menos 330 personas han muerto durante la pasada semana por un brote de cólera que ha afectado a más de cuatro mil 700 individuos debido a las deficientes condiciones sanitarias agravadas por el terremoto.
Tomás amenazó a Santa Lucía y a San Vicente y las Granadinas, en las Antillas Menores, ambas regiones levantaron su alerta luego de que la tormenta se debilitara.
Durante la actual temporada de huracanes se han formado 19 tormentas tropicales, incluidas Shary y Tomas, de las que 12 se han convertido en huracanes.
Este sábado, Shary dejó de ser un fenómeno tropical y se fue desvaneciendo en pleno océano Atlántico.
La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos (NOAA, por su sigla en inglés) prevé la formación de 14 a 20 tormentas y de ocho a 12 huracanes, que pudieran afectar a Estados Unidos, el Caribe, Centroamérica y el Golfo de México.
Los especialistas anticiparon que continuará la temporada de manera «muy activa», porque de esos huracanes cuatro o seis podrían alcanzar gran intensidad.