Miles de funcionarios griegos llevaron a cabo protestas este miércoles en Atenas (capital) contra los despidos del Gobierno, recortes salariales, privatización de empresas públicas y un nuevo impuesto sobre los inmuebles, en la quinta huelga general en lo que va de 2013.
Unas 11 mil 500 personas, según informaron fuentes policiales, se manifestaron por el centro de Atenas bajo la consigna «Ningún funcionario sobra, el que sobra es Samarás» y «Basta de sacrificios humanos».
La huelga fue convocada por el sindicato del sector privado, la Confederación General de Trabajadores de Grecia (GSEE) y público (Adedy), pero debido a las lluvias ambos sectores decidieron suspender las marchas.
Durante la jornada, los hospitales solo ofrecieron servicios mínimos, mientras que colegios y universidades permanecieron cerrados, igualmente la mayoría de oficinas municipales y de la Administración.
Desde la medianoche, no circulaban autobuses ni trenes, sin embargo lo hacían metros y tranvías, para facilitar el desplazamiento de los manifestantes.
El aeropuerto de Atenas modificó los horarios de unos 20 vuelos internacionales y de más de 40 vuelos nacionales y además de la cancelación de una decena de vuelos internos.
Por su parte, periodistas también se sumaron a la huelga con un paro de cinco horas, durante el que sus medios de comunicación transmitieron solo información sobre la huelga.
«No vamos a detenernos. Estamos obligados a luchar, a protestar, a seguir una política constante. Es una maratón», expresó el presidente de la GSEE, Yannis Panagópulos, para quien la política del Gobierno griego y de la troika es injusta y lo único que provocará es acumular problemas aún mayores en la sociedad.
La huelga coincide, además, con la visita de los representantes de los acreedores de la troika -la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional- a Atenas para proseguir la auditoría iniciada en septiembre de las cuentas y las reformas del gobierno de coalición.
REDUCCIÓN DEL GASTO PÚBLICO
El Gobierno de Grecia presentó a inicio del mes de octubre ante la Asamblea Nacional el anteproyecto de ley de presupuesto para 2014 en el que podría ser aprobada una reducción en el gasto público y un fuerte aumento de los impuestos.
El anteproyecto de ley contempla el aumento en más del 10 por ciento de la presión fiscal, para recaudar mil 500 millones de euros adicionales, y un recorte de tres mil 200 millones de euros del gasto público, que saldrán de las pensiones, sanidad, educación y defensa.
En septiembre, el Gobierno de Grecia estaba tomando en consideración la venta de su Patrimonio Nacional tal y como se lo propusieron sus prestamistas internacionales con el fin de que les sea cancelado en el año 2016 los 50 mil millones de euros (65 mil 594 millones 998 mil 784 dólares) que le han otorgado al país como rescate financiero.