El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, expondrá su programa migratorio el próximo miércoles 31 de agosto durante un discurso en la ciudad de Phoenix, Arizona (Estados Unidos), revelaron este miércoles medios locales.
En este sentido el magnate hablará ante unas 500 personas en el hotel, Hyatt Regency de Phoenix, confirmó el presidente del Partido Republicano en ese estado fronterizo, Robert Graham, al periódico local The Arizona Republic.
Asimismo el equipo de campaña de Trump, había programado el discurso para exponer el plan migratorio para este mismo jueves en Colorado, un estado clave con creciente población hispana, pero después se canceló el evento.
A través de un correo electrónico enviado a sus seguidores, el empresario neoyorquino justificó la suspensión de su discurso con que «todavía estaba siendo modificado».
Durante las últimas semanas, Trump ha puesto en marcha una nueva estrategia para librarse de la etiqueta de racista que lo rodea, en torno a una posible moderación de su plan migratorio y un nuevo acercamiento a la comunidad afrodescendiente de Estados Unidos.
En el mensaje enviado a sus seguidores, el magnate se mostró abierto a suavizar las leyes migratorias para permitir que se queden en el país algunos indocumentados que son grandes personas y a los que diferenció de los «inmigrantes malos», es decir, «los miembros de pandillas, asesinos» a los que deportará.
En este contexto, el candidato republicano hizo de la construcción del muro en la frontera con México y la creación de una «fuerza de deportación» para sacar de Estados Unidos a los inmigrantes ilegales los pilares de su plan migratorio durante meses en ese país.
Por otro lado la directora para la comunidad latina de la campaña de la demócrata Hillary Clinton, Lorella Praeli, calificó este giro de Trump de «cínicas estratagemas».
«No hay juego de palabras que pueda ocultar que Trump ha construido su campaña a través de una peligrosa agenda con la que pretende demonizar a los inmigrantes, deportar a 16 millones de personas, construir un muro gigante en la frontera y mandar una fuerza de deportación a nuestras comunidades», señaló Praeli.