Para informar sobre los alcances de las decisiones dictadas por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y competencias de la Sala Constitucional en relación a las leyes adoptadas por la actual Asamblea Nacional –con mayoría circunstancial de la derecha- y el respeto a la Constitución, se desarrolló este miércoles un foro en el estado Guárico, entidad llanera del país.
La actividad realizada en San Juan de los Morros, tuvo como ponente al magistrado Juan Luis Ibarra, integrante de la Sala de Casación Penal, dijo que actualmente algunos sectores hablan de que existe un choque de poderes en Venezuela «sencillamente el Poder Judicial ejerce controles constitucionales».
Detalló que en la Constitución de 1961 prevalecía el Estado de Derecho, donde imperaba la ley, «a diferencia de la Constitución de 1999, donde prevalece el Estado de derecho y de justicia social e impera la Constitucionalidad.
Explicó que la Constitución es muy clara cuando establece que el control concentrado de la constitucionalidad recae sobre el TSJ en la Sala Constitucional, «ya que en la atribución y la competencia que le otorga el texto legal, ha dictado las decisiones correspondientes e inapelables, lo que obliga a que sean acatadas no solamente por los órganos del Estado, sino por todas y todos los ciudadanos que integran la República Bolivariana de Venezuela».
Reiteró que la Sala Constitucional del TSJ es el último intérprete de la Carta Magna.
El Magistrado agregó que actualmente se realiza un despliegue en los diferentes estados, para dar a conocer las fortalezas de la Constitución, a fin garantizar la tutela jurídica efectiva de los ciudadanos «y conozcan la importancia de las leyes».
Ricardo Romero, procurador del estado Guárico, ratificó el compromiso del Ejecutivo regional con el establecimiento de «coordinaciones necesarias entre los Gobiernos regionales y el TSJ sobre las decisiones inherentes al control constitucional».
En la actividad también se desarrollaron temas como el Estado de Justicia y el desarrollo del Estado Constitucional, propugnando como valores fundamentales la paz, la solidaridad, la justicia y la armonía entre los pueblos.