El ministro del Poder Popular para la Educación Universitaria, Edgardo Ramírez, aseguró que las autoridades de las universidades autónomas del país ocultan tras el sistema de selección de nuevos estudiantes, una operación mercantilista.
Durante su participación en el programa Dando y Dando, que transmite Venezolana de Televisión, el ministro Ramírez reiteró que muchas de estas instituciones inscriben a miles de aspirantes para sus pruebas internas, aún cuando ofertan cupos limitados para el ingreso.
Al respecto, citó como ejemplo a la Escuela de Estudios Internacionales de la UCV, donde «6 mil jóvenes depositaron dinero en una cuenta de la universidad, para presentar una prueba interna que sólo ofertaba 80 cupos”.
Denunció que las autoridades de esta misma casa de estudios, al igual que las de la Universidad del Zulia (LUZ) y la Universidad de los Andes (ULA), se niegan a dar información sobre el destino de los fondos recabados mediante la aplicación de las pruebas internas.
Dijo que contrario a ofrecer explicaciones que aclaren esta situación, los rectores acusan infundadamente al Gobierno Nacional de no apoyar a las instituciones que representan, desconociendo los logros educativos de la Revolución, entre los que destacan la creación de más de 20 universidades en apenas 10 años.
Recordó que actualmente, el país ocupa el quinto lugar como potencia del mundo en cuanto a matricula universitaria más alta, puesto que “de cada 100 jóvenes que aspiran ingresar a la educación universitaria en Venezuela, 83 tienen su cupo garantizado”.
Asimismo, reiteró que Venezuela es el segundo país Latinoamericano y caribeño en matricula Universitaria. En este renglón, prosiguió, «Venezuela se ubica por encima de países como Estados Unidos, China, El Reino Unidos, Francia, España, entre otros”.
Por último, Edgardo Ramírez sostuvo que la Revolución Bolivariana tiene como política de Estado la universalización de la educación, la cual se evidencia en hechos como la creación de la Universidad Indígena en el estado Bolívar, donde se ofrecen clases en 11 idiomas aborígenes; y la creación de la Universidad Indígena en Amazonas, que oferta estudios de post-grado dirigidos a los pueblos ancestrales.