Desde 500 hasta más de 800 bolívares cuesta un plato|Vendedores del estado Vargas reportan 50% de disminución en las ventas

Aunque entre las y los temporadistas no hubo ayer mayores quejas en cuanto a seguridad, servicios y limpieza en las playas de Vargas, fue notable el descontento por el precio de la comida y las bebidas, cuyos precios encontraron muy altos. Tanto subieron, que “las ventas han bajado en casi un 50%”, según comentaron las vendedoras y los vendedores que atienden a las y los visitantes.

Con motivo del asueto a los 194 años de la Batalla de Carabobo, el Correo del Orinoco, hizo un recorrido por el estado Vargas, y conversó con los vendedores de los kioscos y las personas que aprovecharon para pasear y disfrutar de momentos de esparcimiento y recreación en las playas del Litoral Central, también conocido como La Guaira.

MÁS SEGURIDAD Y MENOS GANANCIA

En la Playa San Luis, en el kiosco de comida Mi Sueño, María Rodríguez, de La Guaira, manifestó que el día estuvo tranquilo, pero “no se está produciendo mucho, por la situación, el pescado y las cosas está demasiado caro. Por ejemplo, el kilo de limón está alto. Las ventas están muy bajas”.

Indicó que en su negocio ofrece al público platos como pescado frito, fosforera, sopa de pescado, pollo: “El pescado roncador está en 500 bolívares un servicio, la rueda en 650, el pargo en 850. Uno viene a trabajar, en la semana una se gana 7 mil bolívares o 6 mil, ya no es igual que antes”.

Sobre la vigilancia policial, aseguró que la seguridad es “intachable, nunca hemos tenido problemas de delincuencia. Nosotros cuidamos las playas”. Sobre la limpieza de playas, también se mostró complacida , ya que “todos mantenemos limpios los espacios”, así como con los servicios de agua y electricidad, “están muy bien”.

La vendedora de trajes de baños para damas y toallas Maritza Rodríguez afirmó que las ventas “están un poco bajas, no se vende mucho” y los turistas “se quejan por los precios, dicen que están muy caros”. Precisó que un traje de baño para damas “está mínimo, en 2 mil bolívares en adelante. Un pantalón corto para caballero en 800 bolívares y una toalla en 900 bolívares”.

Dichos precios, alegó que obedecen a que el distribuidor “me vende muy caro”, sin exagerar “tengo que tener una ganancia, para volver a invertir para comprar mercancía”.

En torno a la seguridad y los servicios, apuntó que en las temporadas y en los días de fiesta, “veo a la seguridad siempre muy atenta y la limpieza está bien” y el suministro de agua potable falla en ocasiones “a veces los baños no tienen el servicio, hay que mejorarlo”.

Al consultar a los vendedores de los kioscos de comida en la playa Bahía Los Niños, también se quejaron por la ventas bajas. En esa dirección, la vendedora del kiosko El Quemao, manifestó que vende tostones, pescado, fosforera, “la afluencia ahorita está floja. No hay mucha venta”. El costo de los menú, agregó que oscilan entre 650 y 500 bolívares, la fosforera y los tostones en 450 bolívares.

NO ES COMO ANTES

La vocera de los mesoneros de la playa San Luis, Flor María Monagas, aseguró que “la situación está difícil, las ventas han bajado casi en un 50%”. Subrayó que “en tiempos anteriores, un sábado a las 8:00 de la mañana ya había personas instaladas en los toldos de la playa. “Ahora se llena al mediodía y las personas se están acostumbrado a traer lo que van a comer. Uno que otro, viene y se come una sopa o compran un pescado y lo comparten entre dos y tres personas, porque están caros”.

Monagas indicó que a los dueños de los kioscos “le aumentaron todo”, como ejemplo, mencionó los tentáculos, que es uno de los ingrediente para elaborar la fosforera está en 700 bolívares el kilo, mañana puede estar en 900. No hay estabilidad en los precios. Los menús son poco accesible para muchos temporadistas”.

SERVICIOS ESTÁN BIEN

En cuanto a la seguridad, los servicios y la limpieza de las playas, Pedro Silva, de Caracas, señaló que “las he visto muy limpias, todo está muy organizado. Hay bastante afluencia de gente. Todo está tranquilo, hay seguridad”.

Jimmy Madrid, de Caracas, señaló que la limpieza “la he visto muy bien, están en buenas condiciones. Se nota que las limpian. El servicio también, muy buenos, hay unas personas que nos atendieron y nos indicaron donde estacionar el carro, y los toldos y las sillas para sentarnos”.

Le llamó la atención, que el personal de la playa para la atención al público está uniformado: “eso me gusta porque es más fácil identificarlos”.

MÁS SALVAVIDAS

El socorrista Johnny Requena de la Asociación de Salvavidas del estado Vargas, expresó que la atención a los bañistas es ofrecido por tres socorristas de la playa y otros dos que son enviados por Protección Civil, “en total somos cinco para atender esta playa”.

Aseguró que hacen falta más salvavidas para las otras playas, pero “no hay recursos”. En su labor, precisó que están pendiente de las niñas y los niños, impedir que las personas ingresen a la playa con botellas de cualquier tipo y mantener la playa limpia.

Aprovechó la ocasión para solicitar ayuda a las autoridades regionales, “hacen falta más socorristas en las playas, por lo menos tres o cuatro salvavidas por playa”.

T/ Leida Medina
F/ José Luis Díaz