ElGobierno de Venezuela emitió su rechazo categórico a lo que calificó como irónico y absurdo pronunciamiento del G7 sobre el proceso electoral y político venezolano ocurrido el pasado 28 de julio, donde el presidente Nicolás Maduro resultó reelecto por voluntad popular para un tercer mandato.
«Insiste en creerse árbitro de la democracia global mientras encubre sus propios fracasos políticos, económicos y morales, apoyando genocidios y estimulando la propagación de la ideología nazi y fascista», imprime el documento publicado por el canciller de la república, Yván Gil.
El Gobierno nacional señala que es además irónico que estos mismos países que conforman el G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido), que «hicieron el ridículo» apoyando a un «presidente interino», ahora «pretendan dar lecciones sobre voluntad popular y procesos electorales».