La mañana de este jueves, el vicepresidente Ejecutivo de la República, Elías Jaua, participa en su tercera reunión con habitantes de las comunidades que rodean la carretera vieja Caracas-La Guaira, con el fin de darle seguimiento a los acuerdos alcanzados para atender las necesidades de la zona, declarada en parte como de alto riesgo.
Al vicepresidente lo acompañan el viceministro de Planificación de Infraestructura, Alcibíades Molina; la jefa de Gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Farías, y el director de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Luis Fernández.
La actividad se lleva a cabo en la Planta Cantina, del sector Blandín.
Por su parte, el titular de infraestructura presentó a consideración de los vecinos un proyecto de intervención y rescate de la vialidad, tal como se acordó en el encuentro del pasado 26 de enero, entre Jaua y representantes de consejos comunales del sector.
Este jueves, el Estado inaugura también una taquilla para la venta de pasaje preferencial estudiantil, una solicitud de las comunidades.
En la reunión del miércoles 26 de enero, se definió que los entes encargados analizarán zonas de riesgo en este eje, que incluyen sectores como Blandín, Plan de Manzano y El Limón, a fin de precisar las áreas que definitivamente deben ser desalojadas y aquellas donde se pueden efectuar trabajos de estabilización del terreno.
En esa oportunidad, el Vicepresidente recibió unos cuatro proyectos presentados por las comunidades, que ubican terrenos donde pueden levantarse planes de vivienda para aquellas familias que deben ser evacuadas.
El Gobierno Revolucionario verificará la propiedad de los predios y hará los estudios de suelo para, si es procedente, ocupar los lotes y otorgar financiamiento a las comunidades, con el fin de que construyan sus propios edificios.
El objetivo de estas reuniones entre Jaua y los habitantes de la carretera vieja es concretar acciones para garantizar la habitabilidad digna de quienes residen en estos espacios y soluciones estructurales a los problemas del sector.
En todo el eje Caracas-La Guaira habitan unas 10.000 familias, de las cuales 93% está en riesgo, explicó la semana pasada el director de Gestión de Riesgo de la Alcaldía de Libertador, Carlos Padrón.
1.500 familias están en refugios solidarios y 2.100 en albergues dispuestos por el Estado.