El cantautor uruguayo Daniel Viglietti denunció que la Suprema Corte de Justicia (SCJ) ha dado «una suerte de golpe de Estado jurídico», que pretende liquidar los procesos contra los criminales de la dictadura (1973-1985).
Reconocido internacionalmente tanto por su talento musical como por su denuncia de la injusticia, Viglietti dijo que los fallos de la SCJ buscan impedir todo intento de que sean juzgados «los que han torturado, asesinado, desaparecido y secuestrado».
En fin, los responsables de todas las ignominias que se saben; pero hay muchas que ni siquiera se conocen. Hay que investigar, hay que seguir, insistió en entrevista con Prensa Latina durante una masiva movilización la víspera en esta capital.
Si, por un lado, se ha estado excavando la tierra para encontrar cuerpos, hay que seguir excavando la sociedad para encontrar a los responsables de todo eso, subrayó el cantante, compositor y guitarrista de 73 años de edad.
Considerado uno de los mayores exponentes del canto popular uruguayo y latinoamericano, Viglietti expresó su indignación con los más recientes fallos de la SCJ, que declaró inconstitucional una ley que procesaba a los violadores de los derechos humanos durante el régimen militar.
Encarcelado en 1972, el artista uruguayo fue liberado gracias a una campaña encabezada por destacados intelectuales internacionales y debió vivir en el exilio en Argentina y Francia hasta su retorno, a fines de 1984, cuando fue recibido por miles de sus compatriotas en un concierto.
Viglietti, quien –junto al escritor Eduardo Galeano y otras personalidades– también protestó frente a la SCJ la semana pasada por el alejamiento de una jueza que investigaba 50 casos de derechos humanos, consideró importante la movilización en la Plaza Libertad de Montevideo.
«Tenemos que enfrentar la ignominia», insistió, al señalar que los integrantes de la SCJ tienen antecedentes funestos de su conducta política en el pasado.
Es necesario que todos los géneros culturales enfrenten esta medida arbitraria que deja por el suelo la visión de la justicia uruguaya por el mundo entero, agregó.
El autor, entre otras muchas canciones, de «A desalambrar», «Canción para mi América» y «Milonga de andar lejos», también reiteró su apoyo principal a lo que describió como «el centro neurálgico de todo esto»: los familiares de detenidos-desaparecidos.
«Para mí, los gobiernos éticos de nuestros países son los grupos de familiares, madres, hermanos e hijos de los detenidos-desaparecidos», subrayó a Prensa Latina.
Al finalizar sus declaraciones, emocionado, Viglietti agradeció la solidaridad internacional: «ÂíViva Cuba!, ÂíViva Venezuela!, ÂíViva Bolivia!, ÂíViva todo lo que hay que vivar!».