El destituido presidente de Ucrania Víctor Yanukovich ha criticado categóricamente a los Estados Unidos por promover ayuda financiera al nuevo Gobierno de Ucrania.
“EE.UU. no tiene derecho a destinar dinero a los bandidos según sus propias leyes”, ha declarado Yanukóvich en una rueda de prensa celebrada este martes.
En este sentido, ha agregado que pedirá al Congreso, al Senado y al Tribunal Supremo de Estados Unidos, que realicen una valoración jurídica de las acciones de la Casa Blanca.
Asimismo, ha manifestado que sigue siendo el único presidente legítimo y el comandante en jefe de Ucrania, pues no ha sido sometido a un juicio político, de acuerdo a lo establecido en la Constitución de Ucrania.
Igualmente, en otra parte de sus declaraciones, Yanukóvich ha calificado de “ilegales e ilegítimas” las elecciones presidenciales convocadas para el 25 de mayo por la banda, que según él, ha usurpado el poder como resultado de un golpe de Estado anticonstitucional.
El depuesto mandatario ucraniano tampoco ha dudado en arremeter contra las autoridades europeas, a las que ha acusado de «pisar el documento» que garantizaba la paz civil en Ucrania.
«Les pregunto a los aliados occidentales de las autoridades ucranianas: ¿Están ciegos? ¿Han olvidado lo que es el fascismo?», ha señalado.
La crisis política estalló en Ucrania en noviembre de 2013, después de que Yanukóvich se abstuviera de firmar el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea a favor de los vínculos estrechos de su entonces gobierno con Rusia.
El 21 de febrero, Yanukóvich firmó un acuerdo con la oposición para formar un nuevo gobierno y poner fin a la en aquel tiempo crisis política en la que estaba sumido el país.
Bajo los términos del acuerdo, el presidente depuesto de Ucrania otorgó concesiones a la oposición apoyada por Occidente, incluyendo elecciones anticipadas y la formación de un nuevo gobierno de unidad. El acuerdo de paz, sin embargo, fue violado por manifestantes en cuestión de horas.