Al menos siete personas perdieron la vida y 173 fueron heridas tras el paso del supertifón Yagi por áreas al sur de China y al norte de Vietnam, región en la que el evento natural dejó severos destrozos y cerca de medio millón de evacuados.
Las autoridades chinas informaron que al menos tres personas perdieron la vida y 95 sufrieron heridas tras el paso del tifón, que tocó tierra en la región meridional de Hainan en la mañana del viernes con vientos cercanos a los 225 km/h y persistentes lluvias, los cuales derribaron árboles, tendidos eléctricos, destrozaron automóviles y averiaron diversas estructuras. También afectó la provincia de Guangdong y la región autónoma Zhuang de Guangxi.
Debido al efecto combinado de lluvias y vientos se reportaron significativos cortes de servicio eléctrico y de comunicaciones. Alrededor de 420.000 personas debieron ser evacuadas y 1.5 millones de hogares se quedaron sin fluido eléctrico.
El presidente chino, Xi Jinping, dio indicaciones para restablecer cuanto antes los servicios de transporte, energía, comunicaciones y otros vinculados con actividades básicas, así como proteger la vida humana y los bienes de la gente.
En Vietnam, al menos cuatro personas fallecieron tras el impacto de la tormenta, considerada la más potente de su tipo en Asia en lo que va de 2024.
Los decesos se reportaron en las provincias del norte, Quang Ninh y Hai Duong. Al menos 78 personas resultaron heridas, en su mayoría a causa de la caída de árboles y escombros. Medios internacionales señalan que varios barcos fueron hundidos.
Por el peligro potencial de este tifón, las autoridades vietnamitas evacuaron a unas 50.000 personas y desplegaron a medio millón de militares para participar en labores de rescate y recuperación.
Además de fuertes lluvias, capaces de inundar áreas bajas y provocar deslizamientos del terreno, Yagi afectó Vietnam con vientos de hasta 118 km/h y ráfagas de hasta 149 km/h.
T/Telesur
F/AP