«Esta Alianza es un testimonio vivo del poder de la determinación colectiva para desafiar al imperialismo y promover un orden mundial mas equitativo y justo», afirmó Riad Malki, enviado especial de Palestina y asesor del presidente Mahmud Abás para Asuntos Internacionales.
Durante la XXIV Cumbre del ALBA-TCP, el político agradeció a los países de la Alianza por invitar a Palestina de forma especial, así como aprovechó la ocasión para denunciar los crímenes de guerra y de lesa humanidad que cometen Israel y Estados Unidos contra todos y todas las palestinas.
Malki explicó cómo la impunidad concedida a Israel solo extiende el sufrimiento y la muerte de los civiles palestinos que llevan más de siete décadas resistiendo el colonialismo israelí.
«Los ataques deliberados contra civiles, la negación de ayuda humanitaria y el uso indiscriminado de la fuerza constituyen crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra en virtud del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional«, enfatizó Malki, como ejemplificación de dicha impunidad mil veces condenada pero ignorada por los países dominantes.
En ese sentido, condenó que la situación en la Franja de Gaza y en Cisjordania es un recordatorio del fracaso de la comunidad internacional a la hora de actuar contra las violaciones de Israel, pues la catástrofe sanitaria de Gaza es resultado del bloqueo y la ocupación ilegal que ha convertido el 85 por ciento de ese territorio en zona inhabitable.
«La situación en Cisjordania no es menos grave«, agregó, y explicó que las tropas israelíes han intensificado sus operaciones militares, mientras los colonos comenten actos terroristas contra los palestinos de forma sistemática, incluidos incendios y destrucción de tierras agrícolas. Se trata de acciones que además ponen en peligro la estabilidad de toda la región, recalcó.
El enviado especial de la nación palestina señaló los paralelismos notables entre la historia de su país y las de las naciones americanas: «así como las naciones del ALBA lucharon por su soberanía y dignidad, los palestinos siguen resistiendo una ocupación que les niega sus derechos universales».
Y agregó: «Las naciones del ALBA no solo han reconocido estos paralelismos sino que han traducido su solidaridad en acciones concretas. Países como Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Cuba han adoptado posturas valientes al negarse a establecer lazos diplomáticos con Israel», acciones que –dijo– envían un mensaje al mundo de que la justicia y la rendición de cuentas no son negociables.
En su discurso destacó que el pueblo palestino encuentra inspiración en el ALBA, pues más que una alianza política y económica, es una manifestación del invencible espíritu humano y un compromiso con los principios universales de solidaridad justicia y resistencia contra la opresión.
Culminó sus palabras con un llamado a la comunidad internacional para que actúe con decisión y urgencia, ponga fin al negocio en curso en Gaza, garantizando el alto al fuego inmediato y la entrega de ayuda humanitaria, así como exija responsabilidades a los criminales a través de mecanismos como la CPI, la cual ha emitido órdenes de arresto contra Benjamín Netanyahu y Yoav Gallant.
La declaración de Malki en esta cumbre fue una firme defensa de los derechos de todos los palestinos a lo largo del mundo, y el recordatorio de que muchos se han mantenido en silencio frente a los crímenes israelíes.