Un grupo de burócratas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) intenta limpiar la imagen de políticos asociados a la ultraderecha venezolana, quienes robaron fondos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), supuestamente destinados al pueblo venezolano; según denunció este miércoles el ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Yván Gil, mediante su canal de la app, Telegram.
«Algunos burócratas del sistema de Naciones Unidas pretenden lavarle la cara a los corruptos que saquearon los fondos destinados a los venezolanos. Nos venden cifras engañosas para encubrir el escándalo que está por estallar», señaló el diplomático venezolano, al referir que la «ayuda humanitaria» no fue recibida por ningún civil venezolano.
«Es la acción de la diplomacia mafiosa y estafadora», indagó. Así, detalló que dicho dinero fue apropiado por políticos de la oposición radical, quienes lo destinaron a cuentas bancarias ubicadas en el exterior de Venezuela, para financiar sus campañas mediáticas, además de actividades ilícitas como la organización de guarimbas, así como compra de armamento y drogas «para alimentar la violencia en las calles».
En respuesta a esta situación, el canciller Gil aseguró que «ante la inminente caída del castillo de mentiras, sacan reportes inflados para fingir que hicieron algo. Lo que hubo fue una operación de corrupción y sabotaje, disfrazada de ‘ayuda humanitaria’», de esa forma concluyó la publicación, la cual incluye la captura de un artículo de noticias que visualiza una cifra ficticia de personas asistidas por estos fondos.